Lectura 2:00 min
Rechazan cohabitar con Maduro
El día después de las elecciones para renovar la Constitución, el ambiente político oscila entre incredulidad y tensión.
La mayoría opositora de la Asamblea (Congreso) venezolana aseguró que seguirá sesionando normalmente pese a la elección de la Asamblea Constituyente del presidente Nicolás Maduro, que se instalará el miércoles en el Palacio Legislativo.
Estamos aquí no porque nos hayan dado un regalo, sino porque representamos el voto que jamás en la historia venezolana ha tenido un Parlamento (...) y eso tiene que hacerse valer , aseguró en rueda de prensa Julio Borges, presidente de la Asamblea Nacional.
El gobernante socialista y dirigentes electos entre los 545 constituyentes, como la excanciller Delcy Rodríguez, adelantaron que sesionarán en la sede del Parlamento, controlado por la oposición desde enero del 2016.
Borges desestimó los resultados anunciados por el poder electoral en un proceso que tildó de absolutamente ilegal e inconstitucional . La oposición no participó.
Tras la declaración de Borges, el diputado opositor Henry Ramos Allup, quien presidió la cámara en el 2016, negó ante periodistas la posibilidad de cohabitación. No hay convivencia, ni coexistencia, ni nada que se le parezca, tú no puedes convivir con un hampón en tu casa , declaró.
Horas después de que Maduro advirtiera que la Constituyente irá contra los sectores adversos al gobierno, la fiscal general Luisa Ortega una antigua aliada del gobierno convertida en una abierta crítica de Maduro desconoció la elección y consideró que es parte de una ambición dictatorial .
Homenaje a los caídos
Ciudadanos se concentraron en la avenida Francisco de Miranda de Caracas para homenajear a los fallecidos durante las protestas. Varios de los diputados de la Asamblea Nacional estuvieron presentes en el acto convocado por la Mesa de Unidad Democrática.
En su cotidiano mensaje a través de redes, Henrique Capriles trató de contagiar de ánimo a la población.
Los grandes triunfos los hemos convertido en derrotas y no lo son (...) No permitamos que cumplan uno de sus objetivos, que es quebrarnos, no solo económicamente, sino quebrarle a usted la moral, el ánimo .
