Emma Navarro: linaje destinado a hacer historia

Monterrey, N.L.- La tenista Emma Navarro parece destinada a tener un nombre ganador. Su abuelo es una leyenda del futbol americano colegial de Estados Unidos y su padre es un exitoso empresario valuado entre los 3,000 hombres más ricos del planeta.

Ella está tratando de escribir su propio brillo a través del tenis y lo está logrando a pasos adelantados. En enero de 2023 era la número 149 del ranking mundial femenil y actualmente es la número 13, el puesto más alto de su trayectoria profesional.

“Mi objetivo más próximo es entrar al top 10. He avanzado muy rápido y tengo la oportunidad de entrar allí, así que es algo que me encantaría”, comenta Navarro, de 23 años y nacida en Nueva York, en entrevista con El Economista desde las instalaciones del Club Sonoma, en Monterrey.

Navarro es una de las favoritas a ganar el Abierto de Monterrey 2024, que está celebrando su primera edición en categoría WTA 500. Gracias a su ranking, es la segunda mejor sembrada, únicamente detrás de su compatriota Danielle Collins (ranking 11).

La neoyorquina debutó en el WTA Tour en 2019 y desde entonces suma un récord de 193 victorias contra 107 derrotas. Sin embargo, apenas consiguió su primer título en enero de este año, en el Abierto Hobart International de Australia (categoría 250), superando a la belga Elise Mertens.

“Creo que mi mayor victoria fue en Hobart al inicio de este año, antes de eso no creía en mí misma, no estaba segura de que podía ganar un título de la WTA o estar dentro del top 20 del ranking”, platica con cierta timidez en su rostro.

“Me di cuenta de que puedo ser lo suficientemente buena para jugar con las mejores del mundo y ahora estoy en búsqueda de mi segundo título. Definitivamente ese primer trofeo me dio muchísima confianza, fue un gran momento para mí y mi entrenador (Peter Ayers), con quien he estado durante casi ocho años. Compartir ese momento fue muy especial”.

En septiembre de 2023 entró al top 50 del ranking mundial y desde entonces no ha bajado. Inició 2024 como la número 31 del mundo y fue a partir de junio cuando se metió en el top 20, después de su destacada participación en Wimbledon. De hecho, entre Indian Wells y Wimbledon de este año, derrotó a dos top 10: Aryna Sabalenka y Coco Gauff.

Los puntos clave de su crecimiento en el ranking este año fueron, además del título de Hobart, los cuartos de final de Wimbledon (primeros cuartos de final de su carrera en Grand Slam) y las semifinales del Abierto de Canadá (primeras semifinales de su carrera en un WTA 1000).

Pero no es suficiente. Resalta que su próximo objetivo es entrar al top 10 del mundo, aunque a su propio ritmo: “tampoco quiero desgastar mi energía en eso y adquirir mucha presión, pero sí, eso sería increíble para el final de este año”.

El abuelo de Emma, Frank Navarro, es considerado una de las grandes leyendas del futbol americano colegial de Estados Unidos. Fue jugador y entrenador, destacando en las universidades de Columbia y Princeton. Sus ancestros provenían de Italia y de ahí el apellido con tono latino.

En el caso de Ben, su papá, tiene una fortuna estimada en 1,500 millones de dólares y se encuentra dentro de los 3,000 hombres más ricos del mundo, según Forbes. Es prestamista en la empresa Credit One, que posee una cartera de más de 18 millones de tarjetas de crédito en el mundo, y anteriormente fue vicepresidente de Citi Group.

En 2022 adquirió el Abierto de Cincinnati por 300 millones de dólares y también es propietario del Abierto de Charleston, un torneo de categoría WTA 500 que nació en 1973.

Emma señala que el éxito de su abuelo y padre es una fuente de inspiración para su desempeño en el tenis: “Mi abuelo fue un increíble jugador y entrenador, es recordado en la familia por siempre. Mi papá lo ha hecho en su propia manera. Ver lo que ellos hicieron con su vida es muy inspirador para mí. Mi papá y toda mi familia me apoyan y yo quiero seguir mejorando”.

Pero, por ahora, no piensa en emular a su padre: “Ahora mismo no me veo como una mujer de negocios, me gustaría hacer algo en esa área, pero definitivamente ahora estoy concentrada en el tenis. Podrías preguntarme esto el próximo año”, finaliza entre risas.

En este momento, Navarro está calificada para las WTA Finals 2024 como la octava mejor tenista de la temporada, dejando fuera a la campeona olímpica Zheng Qinwen y a la actual campeona de Wimbledon, Barbora Krejcikova. Claro, aún resta el US Open y dos eventos WTA 1000, entre otros torneos, para que se defina la lista oficial de calificadas.

En el Abierto de Monterrey 2024, Emma debutará este miércoles en octavos de final, enfrentando a la colombiana Camila Osorio (ranking 88). Navarro es la cuarta mejor tenista estadounidense del mundo en la actualidad, sólo por detrás de Coco Gauff, Jessica Pegula y Danielle Collins; esta última también compite en el evento regio de este año.

—¿Qué consejo le darías a las tenistas latinoamericanas que van iniciando su carrera, ahora que estás en México?

“Que es muy importante trabajar muy duro y que cuando jueguen estén realmente concentradas. También les diría que no se lo tomen tan en serio, que recuerden que deben divertirse y disfrutarlo, al final esto es sólo un deporte, las cosas se hacen mejor cuando las disfrutas”, concluye Navarro en su charla con El Economista.

Perfil de Emma Navarro

• Lugar de nacimiento: Nueva York, Estados Unidos.
• Fecha de nacimiento: 18 de mayo de 2001.
• Debut profesional: 2019.
• Récord: 193 triunfos y 107 derrotas.
• Entrenador: Peter Ayers (Estados Unidos).
• Finales: 1.
• Títulos: 1 (nivel 250).
• Ranking actual: 13 (el mejor de su carrera).