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Tregua en Siria tiene un nuevo respiro
El ejército sirio extendió el frágil alto al fuego quebrantado en días pasados en la ciudad de Alepo en momentos en que Estados Unidos y Rusia trabajan de manera unida para poner en marcha de nueva cuenta las conversaciones de paz y así tratar de detener la violencia en la región.
El ejército sirio extendió el frágil alto al fuego quebrantado en días pasados en la ciudad de Alepo en momentos en que Estados Unidos y Rusia trabajan de manera unida para poner en marcha de nueva cuenta las conversaciones de paz y así tratar de detener la violencia en la región.
El anuncio del ejército sirio sobre la extensión de la tregua por 48 horas no trajo tanto optimismo para el secretario de Estado, John F. Kerry, quien se encontraba en París para discutir las conversaciones de paz de Siria con sus homólogos de Europa y Oriente Medio. Éstas son palabras en una hoja de papel. No acciones , dijo Kerry.
Antes, EU y Rusia emitieron una declaración conjunta reafirmando su compromiso con una tregua, o como lo llaman, un cese de las hostilidades. Los dos países, copresidentes de un grupo internacional que empuja las conversaciones de paz, se comprometieron a utilizar su influencia con las partes en conflicto Rusia con el gobierno sirio y EU con los grupos rebeldes instando a que se abstengan de provocaciones y dejar de disparar.
Rusia expresó que trabajaría con el gobierno sirio para reducir al mínimo las operaciones aéreas sobre zonas atestadas de civiles o grupos rebeldes que han aceptado la tregua. Esto es particularmente importante en las zonas cercanas a Alepo, donde los combatientes del grupo Jabhat al Nusra, que son respaldados por el grupo terrorista al Qaeda que no forman parte del alto el fuego y son considerados un objetivo legítimo , se adentran a menudo en los bastiones de los rebeldes que son partes en el alto al fuego. La confusión ha contribuido a la desintegración de anteriores treguas.
Sin embargo, Jabhat al Nusra sólo tiene una pequeña presencia en el interior de la ciudad de Alepo, por lo que los grupos rebeldes acusan a Rusia de exagerar la preocupación por la franquicia de al Qaeda como pretexto para atacar a los oponentes no extremistas del gobierno.