Oakland reabre luego de disturbios

Oakland. El movimiento Ocupación de Wall Street declaró la victoria este jueves, luego de que miles de sus manifestantes lograran cerrar por un día uno de los puertos marítimos más importantes del país, en una escalada no autorizada del movimiento cuyas tácticas -desde que nació en septiembre- se habían limitado a marchas, mítines y campamentos.

Es una lástima que se haya dado la violencia por parte de elementos extraños a nuestro movimiento, porque eso permitirá que nuestros detractores nos critiquen aún más , dijo Hale Nicholson, uno de los manifestantes.

En el campamento que se encuentra frente al ayuntamiento y que fuera el escenario de intensos enfrentamientos con las autoridades la semana pasada, los manifestantes iniciaron desde el miércoles por la noche una enorme fogata en plena avenida, lo que inevitablemente llevó a un nuevo enfrentamiento con la policía.

Docenas de policías antimotines se enfrentaron en la madrugada del jueves a cientos de manifestantes, algunos de ellos enmascarados, teniendo como fondo las llamas que emanaban de grandes depósitos metálicos de basura que reunieron los manifestantes en plena calle.

Mientras algunos manifestantes portaban máscaras antigás, otros rompían ventanas de muchos negocios en el centro. En la pared junto a una tienda, se leía la leyenda: Este acto de vandalismo no fue autorizado por la asamblea general. Nuestras protestas son pacíficas . Sin embargo, por doquier era evidente que las manifestaciones se están tornando más violentas y que empieza a reinar el caos.

A pesar de todo, la protesta de cinco horas que paralizó el Puerto de Oakland -el quinto del país en volumen de mercancías- fue mayormente pacífica. Según los organizadores, el bloqueo del puerto tuvo la intención de simbolizar una huelga general en Oakland, misma que generó manifestaciones de solidaridad en Nueva York, Los Ángeles, Houston, Boston y muchas otras ciudades en todo el país.

Cuando se inició el bloqueo del puerto se habían reunido unos 3,000 manifestantes, algunos que llegaron del centro de Oakland y otros que llegaron en autobuses. La multitud impidió las operaciones portuarias bloqueando los accesos y las salidas con vehículos estacionados ilegalmente. Durante la noche y hasta el jueves no se permitió el ingreso o salida de camiones con mercancías. La administración portuaria informó que no se permitieron operaciones hasta el jueves al mediodía.

Hasta la tarde del jueves no se habían cuantificado los daños ocasionados por el cierre del puerto, pero se estimaba que serían por decenas de millones de dólares.

En Oakland, al igual que en Nueva York y otros sitios, crece dentro del movimiento la participación de veteranos de guerra en uniforme, que se han unido a las protestas ante lo que ellos llaman sus escasas posibilidades de encontrar un trabajo digno .

De igual forma, están creciendo en número los manifestantes que llevan a sus hijos pequeños en carriolas, integrando lo que llaman las brigadas infantiles, que protestan la ausencia de empleos para sus padres.

Los organizadores en Oakland explicaron que optaron por bloquear el puerto para detener el flujo de capital. Inusitadamente, el sindicato de estibadores y trabajadores portuarios se unió a la protesta.