México combatirá la piratería en aduanas

México concluyó las negociaciones del Acuerdo Comercial Antifalsificación (ACTA), por lo que será el único país latinoamericano en comprometerse a combatir la piratería a través de un pacto internacional, una vez que sea ratificado por el Senado de la República.

Tras 11 rondas de negociaciones, el ACTA fue concluida el pasado sábado 2 de octubre por 37 países: los 27 de la Unión Europea, México, Marruecos, Estados Unidos, Japón, Canadá, Suiza, Nueva Zelanda, Australia, Corea del Sur y Singapur.

Una de las partes medulares del acuerdo contra la piratería consiste en que esa red de países compartirá lo que denominan bases marcarias , en las cuales se desglosa información aduanal de los cargamentos que se envían entre sí, lo que les permitirá detectar mercancías que violan los derechos de propiedad industrial.

Bruno Ferrari, secretario de Economía, adelantó que el texto del ACTA será difundido por todos los países firmantes mañana, para que los interesados puedan hacerle comentarios y se ultime la revisión legal. Todos los borradores se mantuvieron en secreto durante las negociaciones.

En la práctica, por ejemplo, si Reebok de Alemania decide mandar un cargamento de tenis a Reebok­ de México, las aduanas de los dos países dispondrán de los datos de esa exportación y de cualquiera de los envíos que hagan las otras filiales de la matriz alemana Adidas AG entre las 37 naciones.

Jorge Amigo, director general del Instituto Mexicano de la Propiedad Industria (IMPI), detalló que el ACTA no obliga a las autoridades para que investiguen los delitos vinculados a la falsificación de oficio y que las sanciones no obligan a modificar el régimen jurídico vigente.

Se han venido corrigiendo amenazas a través de las negociaciones. Estas amenazas eran constituirse como vigilante, incluso tener que denunciar ciertas cosas que se hubieran presentado en un momento determinado, eso se ha corregido , agregó Ferrari, al comparecer ante la Comisión de Economía de la Cámara de Diputados.

Como una de las propuestas que no trascendió, la Unión Europea planteó que la falsificación de productos con denominación de origen fuera investigada de oficio.

El ACTA pretende dar una respuesta al incremento de los bienes falsificados, en la medida que cada vez más empresas se sumen al acuerdo. Según Amigo, México se interesó en formar parte porque es uno de los países con mayores problemas.

rmorales@eleconomista.com.mx