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México, preparado frente a choques: RRO
El paquete económico presentado por la Secretaría de Hacienda al Congreso de la Unión, ha sido criticado intensamente por la mayoría de los analistas económicos privados, quienes consideran que plantea variables muy optimistas.
Incluso advierten la posibilidad de que al no concretarse, el gobierno mexicano tendrá que recurrir a un mayor endeudamiento o al recorte presupuestal.
Pero ¿qué es lo que está observando el responsable de las finanzas públicas del país, Rogelio Ramírez de la O (RRO)? ¿Cuáles son los datos sobre los que plantea las proyecciones de las principales variables económicas?
Para empezar, el funcionario considera que el paquete económico 2023 es responsable, equilibrado y realista.
Que las estimaciones y proyecciones son prudentes, dado el complejo contexto internacional y la incertidumbre sobre la economía global.
Y, aunque no da por sentados escenarios extremos, está preparado para enfrentar choques o eventualidades.
Esas son las bases generales de la perspectiva de la Secretaría de Hacienda.La variable oficial que más dudas ha generado entre los expertos no gubernamentales, es la del crecimiento económico para el 2023 proyectado en un rango de entre 1.2 y 3.0%.
Sobre este punto, el titular de Hacienda observa que, desde el segundo trimestre del 2022 el PIB de México ha alcanzado el 97.9% de su nivel pre-pandemia, con un crecimiento de 2% en la primera mitad del 2022, después de un crecimiento de tres trimestres consecutivos.
La fragilidad en las finanzas públicas que observan los economistas no gubernamentales, simplemente no existe para la perspectiva hacendaria.Por el contrario, está convencido de que el gobierno actual, está logrando el fortalecimiento de las finanzas públicas y avanza en la consecución de una posición favorable de México ante el mundo.
Desde su punto de vista, mantener la recuperación económica y los balances macroeconómicos han sido la prioridad.
La planeación fiscal –dice Ramírez de la O– toma en cuenta los retos de la economía nacional, sin asumir escenarios de cola (tail risk, se le conoce en inglés, a aquellos eventos inesperados o que tienen una pequeña probabilidad de ocurrir), como sería una recesión en EU.
El gobierno de México –en consecuencia– descarta una posible recesión en Estados Unidos.
Sin embargo, está preparado ante choques o eventualidades, en cuyo caso realizará los ajustes necesarios a su estrategia y paquete económico para el 2023.
En cuanto a la inflación, reconoce que México resiente un alza no vista en décadas en el nivel de precios.
Sin embargo, observa que las expectativas de inflación se han mantenido ancladas, a pesar de que los precios globales de las materias primas alcanzaron máximos históricos.
Y con el Paquete contra la Inflación (Pacic) y los estímulos a las gasolinas para limitar el precio en las gasolineras, se ha evitado una transferencia inflacionaria de 3.55 puntos porcentuales y una inflación del 12%.
El empleo, según los datos hacendarios, se ha mantenido fuerte, en particular en el comercio y los servicios. Alcanzó máximos históricos de más de 21 millones de trabajadores, con lo que sobrepasó los niveles pre-pandemia, desde octubre del 2021.
El consumo privado también se ha fortalecido. Las ventas en supermercados y tiendas departamentales sobrepasaron ya sus niveles pre-pandemia. Además, las finanzas públicas –anota RRO– México, comparado con otras economías emergentes, cuenta con uno de los niveles más altos de reservas internacionales: 200 mil millones de dólares más la Línea de Crédito Flexible con el FMI de 50 mil millones de dólares.
La deuda pública continúa estable y sostenible, lo que ha sido reconocido por agencias calificadoras soberanas globales.
En este año 2022, 6 de 8 ratificaron sus calificaciones para México, y siete mantuvieron una perspectiva estable.
El secretario de Hacienda reconoce que México no puede tener un desarrollo exitoso por cuenta propia y por ello está impulsando la región de Norteamérica como una prioridad en la agenda de México, EU y Canadá.
En ese contexto, el nearshoring o relocalización de empresas es una oportunidad para fortalecer la región.
Tales son las razones del responsable de las finanzas públicas de México. A ver.
