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Opinión

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Sanidad en el negocio ganadero

Aunque la mayoría de las enfermedades del ganado bovino se pueden prevenir mediante la vacunación y otras prácticas profilácticas, aún existe alta incidencia de algunas como la rabia paralítica bovina, que provoca pérdidas estimadas en más de 120 millones de pesos anuales y la pasteurelosis, principal causa de muerte por afectación en vías respiratorias.

Es importante reconocer que no es suficiente la aplicación de vacunas, hay que asegurarse de la calidad de éstas, pues frecuentemente resultan ineficaces al no tener un correcto manejo y control desde el laboratorio fabricante hasta el productor.

Para que un laboratorio pueda lanzar al mercado una nueva vacuna, debe primero cumplir con las normas de inocuidad y el producto debe satisfacer la potencia y eficacia establecidas por la Organización Internacional de Epizootias, reguladas en México por la Sagarpa.

Una vez que se ha satisfecho el requisito anterior, la vacuna debe distribuirse con todos los cuidados necesarios para garantizar su efectividad, esto a través de una rigurosa cadena de frío, evitando daños físicos y exposición al sol.

Existen distribuidores y proveedores de vacunas que descuidan estos aspectos y las almacenan en condiciones inadecuadas por no contar con equipos de refrigeración apropiados que mantengan las temperaturas óptimas o bien porque no tienen medidas alternativas ante eventuales fallas eléctricas, lo que finalmente resulta en la venta de productos inservibles que el ganadero no tiene posibilidad de distinguir oportunamente.

Continuando con la cadena, en la mayoría de los ranchos ganaderos, la aplicación de la vacuna la hacen vaqueros que no se encuentran debidamente capacitados y, por lo tanto, cometen errores en el manejo y hora de aplicación, implicando además de pérdidas económicas y elevado riesgo sanitario.

Pareciera que la vacunación y medidas preventivas de enfermedades son actividades muy sencillas y rutinarias; sin embargo, deben considerarse de manera profesional por su contribución en la rentabilidad y competitividad del negocio.

Por lo anterior, se recomienda a los dueños de ranchos ganaderos que se capaciten así como a sus trabajadores; para ello, FIRA ofrece eventos de capacitación y demostración de tecnologías de producción animal a través de sus centros de desarrollo tecnológico.

*MVZ Antonio de Jesús Guerrero Cárdenas, es especialista del Centro de Desarrollo Tecnológico Tantakin. La opinión es responsabilidad del autor y no necesariamente coincide con el punto de vista oficial de FIRA.

aguerrero@fira.gob.mx

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