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Profeco vigilará a casas de empeño
Si usted es una de las personas que recurrirá a uno de estos establecimientos para obtener un poco de liquidez y poder llevar la llamada cuesta de enero, no olvide acudir sólo con las empresas registradas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para evitar sorpresas desagradables
Si usted es una de las personas que recurrirá a uno de estos establecimientos para obtener un poco de liquidez y poder llevar la llamada cuesta de enero, no olvide acudir sólo con las empresas registradas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para evitar sorpresas desagradables.
Y para ofrecer mayor certeza, desde el jueves y hasta el 25 de febrero, la Profeco lleva a cabo la primera etapa del Programa Nacional de Verificación y Vigilancia de Casas de Empeño 2011, mediante el cual vigilarán que los prestadores del servicio, tradicionalmente conocidos como casas de empeño, respeten los derechos de los consumidores.
De acuerdo con información de la Profeco, el Costo Anual Total (CAT) más alto que cobran las casas de empeño comerciales es de 269%, aunque los préstamos oscilan entre 5.5 a 20% del valor real del bien que se lleva a empeñar.
Del porcentaje del préstamo el pignorante, es decir, la persona que lleva su prenda al empeño, deberá pagar una tasa de interés mensual que va de 11.5 a 23%, depende de la empresa que reciba sus bienes que pueden ser alhajas, relojes, muebles, automóviles, electrodomésticos, entre otros.
Sanciones
De acuerdo con la Profeco, los proveedores que falten a la Ley Federal de Protección al Consumidor y a la normatividad aplicable se harían acreedores a sanciones económicas que van desde 571 pesos hasta más de 2.2 millones de pesos.
El programa estará vigente durante todo el 2011 en especial durante enero y febrero, periodo en que aumenta la afluencia de consumidores a empeñar diversos bienes para sufragar sus gastos expuso la dependencia mediante un comunicado.
Denuncias
La Profeco invita a los pignorantes a denunciar en caso de que una casa de empeño no cumpla con lo establecido en el contrato, no exhiba los costos del empeño, falte a la ley o incluso maltrate o extravíe la prenda empeñada.
Se han reportado casos en los que algunas casas pierden la prenda y se niegan a pagarla al dueño por eso es fundamental verificar la cláusula, en la cual el proveedor destaca la forma en la que resarcirá el daño por la pérdida o deterioro de los bienes empeñados indicó la dependencia.
Para más información acerca de las obligaciones y derechos tanto de la casa de empeño como de los consumidores, puede consultar la página de la Profeco, profeco.gob.mx, o de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) en condusef.gob.mx.
finanzaspersonales@eleconomista.com.mx
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