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Senado chileno aprueba ampliar beneficios de Ley de Protección al Empleo

La ley, vigente en el país desde abril, permite al empleador suspender la relación laboral con el empleado, pudiendo este último recibir un porcentaje de su remuneración del Seguro de Cesantía.

La Comisión Mixta y el Senado en Chile aprobaron los cambios enviados por el Ejecutivo para la Ley de Protección al Empleo, tema que generó fuertes discrepancias entre la Cámara de Diputados y el Senado.

Entre los cambios que se incorporaron al proyecto, según explicó la autoridad laboral, se estableció la posibilidad de extender la vigencia de la norma, en hasta cinco meses, y la entrega de nuevos giros por parte de la Administradora de Fondos de Cesantía (AFC) a los trabajadores con contratos de trabajo suspendidos.

“Tenemos que recordar que la Ley original tenía una vigencia hasta octubre en el caso de las suspensiones, y de esta manera si las condiciones sanitarias la ameritan, se podrá extender esta suspensión y esta protección al empleo, para que los trabajadores que se encuentren suspendidos por orden de autoridad o porque las condiciones lo requieren, puedan seguir teniendo protección y cobertura”, dijo la ministra del Trabajo, María José Zaldívar.

Ante la comisión mixta, el Gobierno también oficializó la presentación de un proyecto de ley para incorporar a las trabajadoras de casa particular al seguro de cesantía.

“Se establece que van a poder acceder al Ingreso Familiar de Emergencia sin que los recursos de sus giros sean considerados para la entrega de ese beneficio, pero además se empezó a tramitar el día de ayer 26 de agosto, un proyecto de ley que lo que busca es que se incorporen en igualdad de derechos al seguro de cesantía, y de esta manera entonces puedan detener derecho y acceso al fondo solidario”, agregó Zaldívar.

La decisión del Gobierno de presentar esta propuesta se dio a raíz de la presión por parte de los parlamentarios y de las trabajadoras de casa particular que iniciaron una campaña para ser incorporadas al sistema y poder acceder a las prestaciones de la AFC en caso de que sus contratos sean suspendidos.

Hoy la Ley de Protección al Empleo contempla una vigencia de seis meses para realizar suspensiones de contrato de trabajo. Sin embargo, los trabajadores que se encuentren “en pausa” solo pueden acceder al pago máximo de cinco giros por parte de la AFC en el caso de que la relación con la empresa sea a plazo indefinido, y a tres si es a plazo fijo. Con el proyecto, suben a siete los dos.

Además, tras lo aprobado ayer 26 de agosto, se modifican las tasas de reemplazo que recibirán los trabajadores. Así, se mantiene un primer pago correspondiente al 70% de la remuneración, pero desde el tercer al quinto giro, dicho pago será de una tasa de reemplazo de 55%, a diferencia de lo que ocurre hoy, que desde el segundo giro la cifra cae de 55% de forma sostenida.

En cuanto a los dos nuevos giros (ahora siete), serán de una tasa de reemplazo de 30%, cifra que podría aumentar a un 45% si así lo estiman los ministerios de Hacienda y Trabajo, en función del contexto y aplicaría para suspensiones por acto de autoridad. Sin embargo, si la situación sanitaria y económica sigue compleja, las autoridades podrían autorizar la entrega de giros adicionales, los que podrían llegar a ser nueve.

Paliativos en el mercado laboral

La Ley de Protección al Empleo busca proteger la fuente laboral de los trabajadores y trabajadoras, permitiéndoles acceder a las prestaciones y complementos del Seguro de Cesantía, cuando se presenten las siguientes situaciones:

  • Se suspenda el contrato de trabajo por acto de autoridad (cuarentena)
  • Se acuerde un pacto de suspensión del contrato de trabajo
  • Se acuerde un pacto de reducción temporal de la jornada de trabajo

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