Monato obtiene US13 millones de financiamiento para impulsar infraestructura financiera en México

La fintech mexicana Monato anunció una ronda de financiamiento inicial por 13 millones de dólares, liderada por las firmas de capital de riesgo Monashees y FinTech Collective, con la participación de otros fondos de inversión como IGNIA Partners, Clocktower Ventures, Polymath Ventures, Angel Ventures, Kuiper, NOA Capital, así como inversionistas ángeles.

Fundada en el 2024, Monato se especializa en el desarrollo de infraestructura financiera modular y escalable, que permite a empresas de sectores como comercio minorista, crédito y proveedores de servicios de pago, integrar servicios financieros de manera rápida, segura y bajo la normativa mexicana.

La compañía mantiene una alianza estratégica con Finco Pay, institución financiera regulada en México. Mediante este acuerdo, ambas firmas buscan ofrecer la infraestructura financiera para productos relacionados con apertura de cuentas, transferencias de fondos y pagos de servicios.

En menos de dos años de operaciones, Finco Pay ha alcanzado hitos como la conectividad directa con el Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios de México (SPEI) y la autorización de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) para operar como Institución de Fondos de Pago Electrónico (IFPE).

“Muchas empresas quieren ser fintech porque necesitan resolver problemas específicos: algunas buscan atender sus procesos de cobranza, otras mejorar la dispersión de recursos o simplificar los pagos”, explicó Íñigo Rumayor Belausteguigoitia, director ejecutivo y fundador de Monato.

Por otra parte, Monato con la nueva inyección de capital, planea acelerar el lanzamiento de productos como débito directo, soluciones de tipo de cambio, servicios de adquirencia y el desarrollo de plataformas de crédito inteligentes e integradas.

“Nuestro objetivo es ayudar a las compañías mexicanas a integrar servicios financieros con agilidad, seguridad y pleno cumplimiento normativo, eliminando las barreras operativas que históricamente han limitado este desarrollo”, mencionó Rumayor.

Actualmente, la fintech ya cuenta con una infraestructura de pagos en operación y busca ampliar su portafolio complementando sus rieles de SPEI. Además, buscan construir un modelo de financiamiento inteligente y basado en datos.

De cara al futuro, la empresa también evalúa solicitar autorización para operar como Sociedad Financiera Popular (Sofipo), lo que le permitiría ofrecer una gama más amplia de servicios financieros regulados.

“Muchas empresas extranjeras buscan entrar a México porque identifican una gran necesidad. Al final, todos estamos enfrentando el mismo reto: reducir y hacer más eficiente el uso de efectivo. La digitalización de los pagos no sólo facilita las transacciones, sino que también genera información valiosa. Con esos datos es posible optimizar los flujos financieros y, al mismo tiempo, dar mayor visibilidad a la operación de las empresas”, mencionó.