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Pemex, un escenario muy cuesta arriba

Gerardo Flores Ramírez | Ímpetu Económico
Ayer 25 de agosto, se dieron a conocer las estadísticas de producción de Petróleos Mexicanos (Pemex), tanto por lo que hace al ramo de Exploración y Producción, es decir, la producción de petróleo crudo, como también a las otras ramas productivas en las que está involucrada la paraestatal, como es el caso de la producción industrial, dentro de la cual se reportan las estadísticas del sistema nacional de refinación.
De manera concreta, se observa que Pemex presentó su mejor desempeño productivo de 2025, porque reportó una producción promedio por día de 1 millón 379 mil barriles diarios de petróleo crudo. Al incluir el dato de la producción de condensados, un hidrocarburo mucho más ligero, pero de manejo más complejo que el petróleo crudo por ser más inflamable e incluso, explosivo, la producción total reportada fue de 1 millón 648 mil barriles por día.
Si bien se puede decir que se registró una mejora marginal en el desempeño productivo, hay que señalar que, en comparación con la producción de septiembre de 2024, el último mes de la administración del presidente López Obrador, que fue de 1 millón 479 mil barriles diarios, en los primeros diez meses de esta administración, la producción de petróleo crudo, sin incluir condensados, ha caído en 6.7 por ciento. Por donde se le quiera ver, es un mal desempeño operativo, porque a lo largo de los últimos siete años hemos sido testigos de las enormes complicaciones que ha enfrentado Pemex para mantener su ritmo de producción.
Si comparamos contra los primeros diez meses de la administración de López Obrador, se confirma que a la actual administración se le ha complicado más la operación de Pemex. En aquel periodo, entre noviembre de 2018 y septiembre de 2019, la producción de petróleo crudo pasó de 1 millón 697 mil barriles diarios a 1 millón 705 mil barriles diarios, es decir, un muy ligero incremento, de 0.4%. Llama la atención que lo que podría haber sido un simple cambio de estafeta para encabezar una etapa de mejores resultados, se ha traducido en realidad en un cambio que entorpeció el desempeño de la paraestatal, y eso que ahora se supone que tienen un mucho mejor control, por el nuevo estatus constitucional y la reorganización que se ha emprendido.
Así que habrá que seguir de cerca cómo evoluciona el ritmo de producción de crudo porque al menos hasta ahora, se ve complejo el panorama y muy probablemente los actuales directivos de Pemex le queden mal a la presidenta con su planeación estratégica.
Por otro lado, después de que se festinó con bombo y platillo que la refinería Olmeca, la de Dos Bocas, en junio ya estaba procesando alrededor de 200,000 barriles de crudo por día, para julio reportó un retroceso, pues procesó un promedio diario de 156,000 barriles de crudo por día. Es decir, una caída de 18% entre un mes y el siguiente. Claro, es menos peor que lo reportado para la refinería de Tula, que tuvo una caída de 22% en el volumen de crudo procesado, entre junio y julio.
Estos números nos muestran que hay mucha inestabilidad en los procesos productivos en el sistema nacional de refinación, lo que se suma a un desempeño muy por debajo del mercado, medido en forma del indicador conocido como Margen Variable de Refinación (MVR), que en el reporte de resultados del segundo trimestre, Pemex señaló que había logrado un MVR de 4.40 dólares por barril, que si bien es un salto importante respecto a lo reportado un año antes, de 0.84 dólares por barril, aún se ubica por debajo de lo que obtienen las compañías petroleras que operan refinerías en Estados Unidos, o en la India, por citar otro país. Aquí también habrá que estar atentos para observar si Pemex logra mantener esos resultados operativos a nivel de refinerías. Por lo pronto, en el primer mes del tercer trimestre, se anticipa que los resultados fueron menos buenos.
En síntesis, en Pemex, en adición a los desafíos financieros, los operativos se ven todavía más cuesta arriba. La decisión de re-adoptar de un modelo nacionalista está muy lejos de probar que es lo que el país necesitaba.
*El autor es economista.
X: @GerardoFloresR

