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¿Por dónde empezar con tu plan financiero? (Parte 1 de 2)

Mucha gente quiere hacer un plan para mejorar sus finanzas personales pero no tiene ni idea de por dónde empezar. Eso muchas veces los paraliza. Se toman meses buscando la mejor “herramienta” y la “manera” de hacerlo, como si existiera una solución única y universal.
A mí también me pasó. Durante años me pasé buscando la “mejor” manera de hacer mi presupuesto: había meses que ahorraba lo que me había propuesto, pero en otros terminaba gastando de más y eso me generaba muchísima frustración.
Recuerdo que leí múltiples libros al respecto, artículos y videos, encontré diferentes plantillas e invertí meses en hacer la mía propia, que se adaptara a mi gusto y a mis necesidades. Hasta que me di cuenta que la respuesta a mi problema se reducía a entender un simple concepto: el presupuesto no está escrito en piedra y no es una camisa de fuerza. La vida no siempre sale como uno la planea y de hecho muchas veces se cruzan cosas (y gastos) inesperados. Lo importante es que cuando eso pase, ese día, en ese momento, tenga la capacidad de modificar mi presupuesto y adaptarlo a esa nueva realidad. Esa era la clave.
No era la “herramienta” y tampoco la “mejor manera”. Porque cada persona es distinta y el método que funciona para ti, muy probablemente no se adapte a mis necesidades, a mi forma de ser o a mi estilo de vida.
Sí eran los conceptos. En ese camino aprendí muchas cosas que me han servido para la vida e incluso de inspiración para mis columnas. La educación financiera es esencial, pero sirve de poco si no tomamos acción. Siempre podemos ir aprendiendo y mejorando, ajustando nuestro plan (al igual que ese presupuesto), pero tenemos que iniciar nuestro camino.
¿Por dónde empezar?
La respuesta es sencilla: por el principio, entender cuál es tu situación financiera actual. Comprender dónde estás parado financieramente, cuál es el punto de partida.
Eso te da mucha claridad. Puedes saber qué está bien, pero sobre todo qué tienes que mejorar. Eso te da una idea de cuáles podrían ser los siguientes pasos: tus objetivos inmediatos.
Hay gente que tiene muchas cosas pero se sorprende cuando ve que su patrimonio es en realidad muy pequeño o incluso negativo. Deben la casa, el coche, mensualidades sin intereses y buena parte de lo que ganan lo tienen que destinar a pagar esas deudas. No tienen un peso ahorrado por si pasa algo, ninguna inversión para construir su libertad financiera (tener cómo vivir durante su retiro, cuando ya no puedan o ya no quieran trabajar).
¿Cómo determinar tu situación financiera actual?
En realidad, es muy sencillo y sólo toma algunos minutos. Se trata de hacer una lista del dinero que tienes (el saldo en este momento de todas tus cuentas bancarias y de inversiones) y otra lista del dinero que debes (el saldo en este momento de todos tus créditos).
Trata de ordenarlas en función del plazo. Por ejemplo, el saldo de tu cuenta bancaria donde manejas tu dinero para gastar estaría primero, tu ahorro para el retiro después, porque es de largo plazo. Lo mismo con tus créditos, lo que debes en tarjetas va primero que la hipoteca, que es un crédito de muy largo plazo.
Ahora bien, únicamente si tienes un coche que debes, puedes incluirlo, si quieres, en la lista de lo que tienes. Para saber su valor, busca una cotización en un portal como el de Kavak (eso te dice cuánto te darían por ese auto en el mejor de los casos). Si tu coche es relativamente nuevo y diste poco de enganche, es incluso probable que el valor del auto sea menos de lo que debes por él. Recuerda que un auto pierde casi una cuarta parte de su valor en el momento en el que lo sacas de la agencia.
Si no tienes un crédito relacionado, mejor no los incluyas, porque son bienes que se deprecian y de uso cotidiano (como casi todo lo demás que tienes en tu casa).
Lo que sí puedes incluir –independientemente de si tienen un crédito o no– son tus bienes inmuebles, si los tienes. Para conocer su valor, busca algunos similares y en la misma zona, en un sitio como Inmuebles 24 (así tendrás una idea del valor del metro cuadrado de construcción en tu zona).
El valor de tu patrimonio es la resta de lo que tienes menos lo que debes. Pero además, con este ejercicio, puedes tener un montón de información sobre tu situación financiera. ¿Quieres saber cuál? No te pierdas la segunda parte en donde hablaré precisamente de esto.
Para determinar tu situación financiera actual debes hacer una lista del dinero que tienes (el saldo en este momento de todas tus cuentas bancarias y de inversiones) y otra lista del dinero que debes.