Cuota impulsa un auge en las detenciones de inmigrantes

Karnes City. EN LOS últimos cinco años, los funcionarios de seguridad han encarcelado a un número récord de inmigrantes, impulsados por una poco conocida directiva del Congreso, llamada en el Capitolio como el mandato de la cama .

La política requiere al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por su sigla en inglés) mantener un promedio de 34,000 detenidos por día, una cuota que ha aumentado de manera constante desde que fue establecida en el 2006 por los legisladores conservadores, que insistían en que la agencia no estaba haciendo lo suficiente para deportar a los inmigrantes ilegales.

Pero a medida que los cruces ilegales de México han caído a cerca de sus niveles más bajos desde la década de 1970, el ICE ha logrado las metas de detención de inmigrantes impuestas por el Congreso, al llegar más profundo en el sistema de justicia penal, para expulsar a residentes legales en Estados Unidos condenados por algún delito que pudiera hacerlos elegibles para la deportación. La agencia también ha aumentado considerablemente el número de inmigrantes indocumentados en custodia, tras los arrestos hechos por la policía local durante paradas de tránsito rutinarias.

Funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés) afirmaron que no están encarcelando innecesariamente a inmigrantes para cumplir una cuota y que encuentran a un gran número de candidatos para la detención y la deportación al enfocarse en criminales que representan una amenaza para la seguridad pública.

No obstante, los críticos del mandato han destacado que la mayoría de los detenidos del ICE no son delincuentes violentos. Los jueces migratorios permiten a muchos permanecer en Estados Unidos, pero los detenidos pueden pasar meses en una costosa prisión federal, aún cuando existen alternativas mucho más baratas disponibles, tales como grilletes y otras formas de vigilancia electrónica.

Funcionarios del DHS indicaron al Congreso, durante el debate sobre el castigo presupuestario, que la agencia puede ahorrar dinero mediante la reducción de la cuota a 31,800 y usar alternativas más baratas a las cárceles. Sin embargo, los republicanos repelieron con éxito la propuesta y ordenaron al ICE gastar casi 400 millones de dólares más de lo que pidieron.