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Opinión

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¿Por dónde empezar con un plan financiero? (Parte 2 de 2)

La respuesta la di en la primera parte. Hay que empezar por el principio: entender cuál es tu situación financiera actual. En otras palabras, dónde estás parado hoy. Ese es tu punto de partida. También mencioné cómo hacerlo.  

Ese ejercicio te puede dar un montón de información, por ejemplo:

-Cuál es el valor de tu patrimonio. Algunas personas tienen muchas cosas, pero se sorprenden cuando se dan cuenta de que su patrimonio es negativo: deben más de lo que tienen. Eso es más frecuente de lo que parece.

-La composición de tus activos. Sabes cuánto dinero tienes para el día a día, cuánto es tu fondo para emergencias con liquidez inmediata, cuánto es tu ahorro a mayor plazo o para el retiro, etc. Es fácil darte cuenta que si, por ejemplo, 98% de tu patrimonio está en bienes no líquidos (por ejemplo inmuebles), implica que tienes muy poco margen de maniobra. Eso no es muy sano.

-El tamaño de tus pasivos en relación con tus activos. Si debes un porcentaje elevado de lo que tienes, comprenderás que eso tampoco es bueno.

-La calidad de tus deudas. El crédito es una herramienta para crecer, no para hacer compras del día a día. Si la mayor parte de lo que debes son tarjetas de crédito o préstamos personales (crédito al consumo), esto podría ser un foco rojo.

Esto también te permite darte cuenta cuáles podrían ser tus siguientes pasos. ¿Tienes deudas de consumo? Una buena idea podría ser hacer un plan para salir de ellas. ¿No tienes ningún colchón para imprevistos? Quizá sea tiempo de empezar a construir un fondo para emergencias, aunque sea pequeño, para que puedas manejar cualquier contratiempo sin tener que endeudarte.

Yo recomiendo hacer este cálculo periódicamente: al menos cada tres meses (aunque es ideal cada mes). Hay algunas apps de manejo de dinero que lo hacen automáticamente. ¿Por qué? Esto te permite ver la evolución y si tu situación financiera ha mejorado o no. Por ejemplo: podrás ver si tu patrimonio va creciendo o no (y por qué), si tus deudas han bajado, etc.

Comprende tus hábitos de consumo

Además de calcular el valor de tu patrimonio, es importante también que entiendas de dónde viene tu dinero (cuáles son tus fuentes de ingresos) y cómo lo gastas, ya que esto puede ser la raíz de muchos de tus problemas financieros.

Muchas personas, por ejemplo, gastan más de lo que ganan frecuentemente. No se dan tanto cuenta, porque usan su tarjeta de crédito y al principio pueden pagar la mensualidad (pago mínimo) sin problemas. O usan meses sin intereses. Pero si siguen haciendo lo mismo, esos montos se irán acumulando hasta representar un porcentaje elevado del ingreso mensual.

Hay otros que manejan muy bien su gasto cada mes, pero los gastos irregulares les agarran en curva. Cuando se presentan, tienen que pedir prestado. Algunos tienen la esperanza de sufragar con otros ingresos irregulares como el “bono” que puede presentarse o no, el “fondo de ahorro” o el “aguinaldo”. Eso tampoco es muy sano.

Lo importante en este momento es entender de dónde viene nuestro dinero y a dónde se va. En otras palabras, cómo lo estamos manejando. Esto nos da información que nos permite entendernos a nosotros mismos y nuestras decisiones de gasto, pero también nos permite darnos cuenta de qué cosas podríamos mejorar. Por ejemplo: ¿en qué estamos gastando demasiado?

Como siempre digo, una buena salud financiera no necesariamente se trata de no gastar (o gastar menos) sino de hacerlo con inteligencia, en aquello que es más importante para nosotros.

Hay gente que piensa que si ganara más, podría resolver todos sus problemas. Eso no necesariamente es cierto. Claro que ganar más ayuda, pero frecuentemente la gente que gana más, también empieza a gastar más. Le surgen otras “necesidades”. He conocido directivos de empresas, con salarios muy altos, que tienen graves problemas financieros.

De esta forma, es importante aprender a manejar nuestro dinero independientemente de nuestro nivel de ingresos. El primer paso para hacerlo es entender cómo estamos parados, de dónde viene nuestro dinero y a dónde se nos va, lo cual también nos da las claves para dar nuestros primeros pasos firmes y mejorar nuestra salud financiera.

Después de conocer nuestro punto de partida, tendremos que comprender qué es lo más importante para nosotros y a dónde queremos llegar. Porque un plan financiero es simplemente una hoja de ruta que nos lleva desde dónde estamos hoy, hasta el destino que hemos elegido.

Ejecutivo de alto nivel en seguros y reaseguro con visión estratégica de negocio, alta capacidad de liderazgo, negociación y gerencia. Además es columnista de Finanzas Personales en El Economista, Coach en Finanzas Personales y creador de la página planeatusfinanzas.com

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