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Copra, agronegocio con mercado potencial
Durante la última década, la producción de copra (pulpa seca del coco), en México ha presentado un dinamismo marginal, al crecer a una tasa media anual de 0.7% durante el periodo 2002-2011. Sin embargo, la superficie disponible para esta actividad se ha reducido 2.3% en el mismo periodo; por lo que el incremento citado se sustenta con un alza de 2.9% de la productividad.
En este sentido, los estados de Guerrero, Colima, Tabasco y Oaxaca concentran anualmente 96.3% de la producción nacional; equivalente a 206,000 toneladas de copra.
Sin embargo, es importante mencionar que existe una demanda insatisfecha de este producto en los mercados nacionales e internacionales, ya que de la copra se obtienen diferentes subproductos tales como: aceites para la elaboración de jabones, cremas y champú; todos dirigidos a la industria cosmética.
Además, otro segmento de mercado es el de la industria alimenticia, especialmente para la elaboración de margarinas, manteca para confitería, panadería y leche saborizada. El mercado potencial se ubica en la Unión Europea, donde países como Alemania, Holanda y Francia son las principales naciones que demandan el aceite de coco.
Una de las tendencias mundiales que están ocasionando una mayor demanda por los aceites vegetales (aceite de coco), es la disminución en el consumo de aceites de origen animal, sobre todo, por aspectos de salud.
Otro mercado potencial es la elaboración de agua de coco, donde existen empresas nacionales y extranjeras con marcas posicionadas en el mercado que requieren de proveedores de materia prima para garantizar su abasto en los mercados.
Por otro lado, a nivel nacional se observa una reducción de la oferta de dicho producto, lo anterior ha ocasionado el movimiento de los precios principalmente en el 2011. En este año el precio por tonelada de copra reportó un incremento de 600 pesos por tonelada, es decir, de 11.8% respecto del año anterior.
Así, surge una oportunidad de negocio para los productores dedicados a esta actividad, toda vez que existe un mercado local para la compra de copra en algunas entidades como Jalisco, Tabasco, Colima y Guerrero, principalmente, o bien, optar por la venta de producto para la elaboración de bebidas saborizadas a través de esquemas de proveeduría.
Para concluir, esta actividad puede adoptar y adaptar las estrategias de mercado que se han desarrollado con cultivos como el café, en el estado de Chiapas, donde se establecen buenas prácticas, sanidad, certificaciones, organización de productores, esquemas de desarrollo de proveedores y contratos de compra venta con empresas nacionales e internacionales principalmente, lo anterior permitiría mejorar las condiciones de vida de los productores de coco. ?
*José Ramón Ojeda Ledesma es especialista de la Subdirección de Evaluación de Programas de FIRA. La opinión es del autor y no necesariamente coincide con el punto de vista oficial de FIRA.
jrojeda@fira.gob.mx.