Industria del transporte público advierte sobre la necesidad de una política pública para incentivar la movilidad urbana

Con un impacto severo por la menor demanda en hasta 80% por el confinamiento por la pandemia de Covid-19, la industria del transporte público ha desembolsado 9,800 millones de pesos para los procesos de sanitización, que ha generado un hueco a las finanzas de los “hombre-camión” y que están en riesgo al carecer de una política pública para incentivar la movilidad urbana.

Alejandro López, presidente de la Asociación Mexicana de Autoridades de Movilidad (AMAM), explicó que las empresas del transporte urbano han trabajado para mejorar su flota y conservar la salud de las personas durante la pandemia, pero existe la "falsa percepción" de que en el transporte público es foco de contagio, lo que pone en jaque al sector que no ha reactivado su movilidad.

Antes de la pandemia de Covid-19, el transporte público era utilizado por 50 millones de usuarios a nivel nacional, lo que significa 40% del total de la población total del país. Y esa población reporta ingreso promedio de 7,000 pesos mensuales, dijo.

“El distanciamiento físico y trabajar en el ordenamiento y limitar la capacidad de las unidades es otro impacto que resienten los operadores y concesionarios. No es lo mismo pagar el viaje en un autobús saturado con uno al 50%, puedes tener un 30% del ingreso”, lo cual está complicado las finanzas de los transportistas, y urge una política pública.

Aun cuando las empresas han destinado recursos y personal para desinfectar cotidianamente los autobuses, se considera que éstos son fuente de alto contagio de Covid-19, dijo la AMAM, quien agregó que de acuerdo con un análisis en Nuevo León, reveló que del total de contagios que se presentaron en cierto periodo, 10% de las personas era usuaria de transporte público, aunque no quiere decir eso que ese porcentaje se infectó en algún vehículo masivo.

Al participar en el evento “Expo Virtual 2020” organizada por Mercedes–Benz Autobuses México”, en donde se impartió la conferencia “¿Cómo llevar a México al siguiente nivel de movilidad?”, Miguel Elizalde, presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), afirmó que la fórmula del futuro de la movilidad tiene que venir respaldada de una política gubernamental con recursos asignados “porque se atienden puntos vulnerables, porque mueve a más de 40% de trabajadores a sus trabajaos”.

Para ello, se pronunció por la renovación de la flota a través de incentivos gubernamentales como el financiamiento de la banca comercial y poder ofrecer un mejor servicio.

“Sería conveniente que la actividad en la materia fuera guiada por políticas públicas soportadas en programas sectoriales avalados por la SCT, la Semarnat, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, así como la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Sedatu, los cuales estuvieran definidos en el Presupuesto de Egresos de la Federación e instrumentados a través de Nacional Financiera, Nafin, con el apoyado de la banca de desarrollo”, planteó Elizalde.

kg