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Estructura criminal sigue en pie
Desde enero pasado, cuando inició la estrategia federal en Michoacán, a la fecha, no han habido resultados contundentes y el conflicto no se ha tratado como pluridimensional, armado, profundamente arraigado en la historia social regional y con un contexto de ausencia total de justicia, refiere la organización México Evalúa.
Desde enero pasado, cuando inició la estrategia federal en Michoacán, a la fecha, no han habido resultados contundentes y el conflicto no se ha tratado como pluridimensional, armado, profundamente arraigado en la historia social regional y con un contexto de ausencia total de justicia, refiere la organización México Evalúa.
En su análisis Entender para atender: por una estrategia de Estado en Michoacán , refiere que pese a las detenciones y ejecuciones de algunos líderes capos que se han llevado a cabo, las estructuras criminales siguen en pie o se están reconstruyendo. Además, las condiciones sociales y políticas de la crisis no han sido atendidas y las dimensiones humanas o psicosociales del movimiento de las autodefensas tampoco forman parte del enfoque gubernamental.
La inmersión de la región y de sus habitantes desde hace varias décadas es un sistema donde el único recurso político útil ha sido la violencia, en sus formas más crueles, tanto de autoridades como por grupos criminales, contribuyeron así a la destrucción progresiva del tejido social .
Para esta organización, dedicada al análisis de temas de seguridad, lo que parece estar buscando el gobierno federal no es el restablecimiento de la ley, sino la reinstalación rápida de un equilibrio a través del apoyo a ciertos grupos armados para regresar, poco a poco, a una configuración de monopolio de violencia..
El documento expone que la estrategia federal fue avanzar y afianzar su dominio mediante la promoción de oposiciones: es decir, autodefensas contra fuerzas federales, autodefensas contra Los Caballeros Templarios y finalmente, autodefensas cooptadas (la policía rural) contra autodefensas rebeldes , es decir, las no afines.
Sobre el desarme que se planteó, asegura que no resuelve la violencia, primero porque muchos miembros de las autodefensas registraron sus armas, incluso de alto calibre, y regresaron a casa con ellas. Asimismo, otros grupos de autodefensas advirtieron públicamente que no depositarían las armas. Lo que recomienda México Evalúa es que el gobierno reconozca que en Michoacán existe un conflicto pluridimensional, armado y profundamente arraigado, en un contexto de ausencia total de justicia.
Exaltó que hay una promoción social ligada a la pertenencia de un grupo criminal, la cual debe ser remplazada por oportunidades laborales y atención social. El gobierno federal debe atender las problemáticas sociales locales para minar el poder de cooptación de la población por parte de los grupos criminales .