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Las tres alternativas inteligentes para utilizar tu aguinaldo
Joan Lanzagorta | Patrimonio
Cuando el aguinaldo es verdaderamente un ingreso adicional (es decir, no te lo gastaste desde antes de recibirlo) representa una gran oportunidad para alcanzar una meta, darle la vuelta a nuestra situación financiera o acelerar la construcción de nuestro patrimonio a largo plazo.
Aunque hay muchas formas de utilizarlo, para mí estas son las tres grandes alternativas inteligentes, que explicaré a detalle enseguida:
1. Alcanzar una meta
Una de las formas más gratificantes de utilizar dinero extra es precisamente para lograr algo que hemos deseado desde hace mucho, o para cosas que enriquezcan nuestra calidad de vida.
Puede ser un viaje, una actividad recreativa con la familia o también la compra de un bien de alto valor.
En particular, algunas veces he destinado mi aguinaldo hacia un viaje que estoy planeando con mi esposa. Es una actividad que nos encanta hacer (nos gustaría tener la oportunidad de viajar más, pero se hace lo que se puede). La experiencia de conocer un nuevo lugar, gente con otras maneras de ser y de pensar, probar comidas diferentes, siempre nos brinda una nueva perspectiva de la vida. Nos enriquece mucho.
2. Mejorar significativamente tu salud financiera
En la columna anterior mencioné que durante algunos años usé parte de mi aguinaldo para hacer pagos a capital en mi crédito hipotecario. Eso fue parte de una estrategia que me permitió pagarla en menos de cinco años, con un ahorro considerable de intereses.
Otras personas a las que he tenido la fortuna de ayudar, lo han usado para dar la vuelta completamente a su situación financiera.
Por ejemplo: si tienes deudas de consumo (tarjetas de crédito, préstamos personales o de nómina), el aguinaldo puede ayudarte a dar pasos significativos en tu estrategia para salir de ellas.
Si estás apenas construyendo tu fondo para emergencias, de la misma forma el aguinaldo puede darte el impulso que necesitas para completarlo (o acercarte a tu meta).
3. Invertirlo para alcanzar tu libertad financiera más rápido
No es un secreto: el patrimonio se construye con ahorro e inversión a largo plazo. Con constancia, consistencia, disciplina.
En otras ocasiones he explicado el concepto del interés compuesto y he demostrado cómo el tiempo es la variable más importante. He demostrado cómo las personas que empiezan antes, con poco dinero, por lo general logran más que aquellos que comienzan años después, con contribuciones significativamente más elevadas. En este sentido, tiempo es dinero.
A lo largo de los años, parte de mi aguinaldo también se ha ido hacia mi plan de retiro. A construir mi futuro y mi libertad.
Aunque uno debe tener cuidado. Hoy en día, en redes sociales, se promueven muchos planes de retiro de altísimo costo con verdades a medias (o mentiras disfrazadas). Se enfatizan los beneficios de deducibilidad, pero también se hacen proyecciones con rendimientos mucho más altos que los que van a generar después de todas las comisiones y costos. En el caso de aquellos que se comercializan como seguros garantizados, los agentes utilizan proyecciones con inflación: la cantidad que vas a recibir en el futuro parece muy grande, pero ese es el puro resultado de proyectar la inflación. En términos reales tu ganancia es cercana a cero. Pídeles que te hagan la corrida con inflación “cero” para que te des cuenta.
Ten mucho cuidado en dónde pones tu dinero, sobre todo de largo plazo. Toma decisiones de inversión inteligentes.
Aunque es importante aprovechar los beneficios y estímulos fiscales a los que tienes derecho, muchas veces no compensan los costos inherentes a estos productos. Además de que muchas veces en la práctica, el SAT pone trabas, especialmente si el monto de tu devolución es elevado.
Aprende siempre a evaluar lo que te venden, a tomar decisiones inteligentes y adecuadas. Para eso sirve la cultura financiera y las bases que procuro explicarte en este espacio.
En resumen
El aguinaldo representa una oportunidad para reflexionar sobre tu vida y tu salud financiera, para tomar decisiones que te acerquen a lo que es más importante para ti. Por eso es importante utilizarlo bien, de manera consciente, intencional y estratégica.
Entonces, te invito a que te tomes un tiempo para evaluar tus prioridades. ¿Qué es lo que quieres que ese dinero haga por ti? ¿Qué necesitas? ¿Cómo puedes usarlo para mejorar tu calidad de vida hoy o en el futuro?
Si ya te lo gastaste desde antes en el “Buen Fin” o de otra forma, sirva esto como una invitación para que el siguiente año se convierta en una oportunidad para añadir más valor a tu vida.