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De la Sedena, 90% no ha sido evaluado
La evidente ineficacia en aplicar pruebas de control de confianza del gobierno que está por concluir e impulsado por Genaro García Luna, quien se asumió como bandera para refundar corporaciones policiacas en el país, ha sido de igual modo en la Sedena.

La evidente ineficacia en aplicar pruebas de control de confianza del gobierno que está por concluir e impulsado desde la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) por Genaro García Luna, quien se asumió como bandera para refundar corporaciones policiacas en el país, ha sido de igual modo en la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), dado que sólo aplicó a 17,838 elementos de más de 260,00 que conforman el Ejército y Fuerza Aérea Mexicana (FAM).
Esto según una respuesta a una solicitud de transparencia de la Sedena, que reportó que del 2006 a septiembre del 2012 aplicó 17,838 exámenes de control de confianza a través de su propia Unidad de Control de Confianza, lo que significa que es la misma institución la que evalúa a su personal y no un órgano externo neutral.
La institución castrense precisó que ha sometido a ese tipo de evaluaciones a 494 generales, 2,055 jefes, 8,429 oficiales y 6,860 elementos de tropa, lo que dan un total de 17,838 elementos, de más de 254,705 elementos en funciones con que cuenta, según un último corte oficial, lo integran 195,000 hombres y más de 11,000 mujeres.
Lo que no explica en su respuesta la Sedena es si la mayoría de la tropa se encuentra exenta de esa prueba o es aleatoria entre todo el personal que se encuentra desplegado en los 31 estados y Distrito Federal, donde se encuentra su sede nacional.
De acuerdo con el organigrama de la Secretaría de la Defensa Nacional, sus elementos se estructuran de abajo hacia arriba y en nivel jerárquico se construye de la siguiente manera: soldado, cabo, Sargento Segundo, Sargento Primero, Subteniente, Teniente, Capitán Segundo; Capitán Primero, Mayor, Teniente Coronel, Coronel; General, General Brigadier, General de Brigada, General de División y el grado más alto en jerarquía en la Sedena es el de cuatro estrellas, que lo porta el General Secretario de la Defensa Nacional.
Otro punto que no dejó claro la Sedena en su informe es desde qué grado se debe asumir que son jefes y oficiales o si son a partir de cabo, que es cuando un civil con escasos estudios inicia su ascenso, mientras que los de carrera elevan su grado con su desarrollo en las instituciones de enseñanza del Ejército y Fuerza Aérea Mexicana.
rtorres@eleconomista.com.mx