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Opinión

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Puertos mexicanos, en la mira de piratas

La actividad en los puertos mexicanos crecerá en los próximos meses, lástima que no será en operaciones productivas, sino en demandas y contrademandas que preparan ejidatarios tras la querella que ganó el equipo de Diego Fernández de Cevallos al puerto de Altamira por más de 1,500 millones de pesos.

Las joyas de la corona para los ejidatarios inconformes, que ya son asesorados por despachos de abogados, se dirigen a Manzanillo y Lázaro Cárdenas, donde confluyen empresas como Kansas City de José Zozaya, SSA México de Francisco Kassian, TIMSA de Luis Alemán, Ocupa de Alberto Lara, Mittal Steel de Lakshmi Niwas Mittal, CFE de Alfredo Elías Ayub, Hutchison de Jorge Lecona, Ferromex de Alfredo Casar y Puerta México de Jorge Medina Armienta.

Si las sentencias fueran favorables para los ejidatarios, no necesariamente se paralizarían las labores de los puertos, pero el temor en el de Lázaro Cárdenas es que el problema tome tintes radicales, pues existe el agravante de las fricciones sociales, los problemas entre sindicatos mineros, narcotráfico, falta de servicios y la inseguridad; mientras que en Manzanillo el caso podría sumar los conflictos entre la comunidad por la ubicación de la nueva terminal de contenedores, la presión de los empresarios inmobiliarios y las dificultades entre la autoridad portuaria y el gobierno estatal.

La situación es alarmante, ya que los empresarios que tienen instalaciones y operaciones portuarias desconocen en qué acabará este conflicto que inició con la querella que encabezó el Jefe Diego.

Desde luego que no se descarta que los inconformes dirijan también sus objetivos a los terrenos de Punta Colonet, el proyecto de infraestructura más importante del sexenio y que se reactivará al final del año. La situación es parecida al caso de Altamira y se espera una embestida legal a inicios del 2010.

Los ejidatarios ya se organizan para realizar demandas en conjunto, mientras que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes que encabeza Juan Molinar Horcasitas ya tiene a su equipo jurídico al tanto de la situación para reaccionar ante las múltiples demandas que se avecinan, aunque saben que la marea será difícil de sortear, pues los inconformes recurrirán a despachos de primer nivel para garantizar los resultados.

La realidad es que los piratas ejidales tomarán los puertos, pero no por mar, sino por tierra y armados con cañones de los litigantes más reconocidos del país.

SAP y PEMEX: idilio de amor

Todo empezó en una excelente relación entre Miguel Cruz, exdirector de SAP, y el actual director corporativo de Pemex, Raúl Livas Elizondo, quien trabajó en la firma Intellego.

Los negocios en México marchaban viento en popa para SAP, firma alemana, y ganaba licitaciones por doquier.

Por ejemplo, Pemex se había convertido en menos de cinco años en uno de los principales clientes para SAP, la cual ya era observada por otras firmas que competían en las licitaciones y las perdían.

Por ello se decidió en algún lugar de Santa Fe que sería ideal tener a un aliado en la misma paraestatal, pues se podía contar con información privilegiada que contribuiría a generar más oportunidades de negocio para la firma alemana.

Sin embargo, se les cayó el sistema a tal grado que trascendió que, el mismo día en que se destapó la posible corrupción entre SAP y Pemex, se reunieron representantes de la firma alemana con Manuel Reynaud Aveleyra para delimitar las acciones que seguirían conjuntamente.

La situación tocó fondo el viernes pasado, ya que tras la confirmación de los nexos SAP-Raúl Livas, se espera que las fuentes de Pemex destapen toda la cloaca que une a la paraestatal con SAP, así que no dude que Función Pública de Salvador Vega le pueda regalar una inhabilitación de más de 10 años a SAP.

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