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Con todo y freno de mano, crece venta de autos

No obstante que la comercialización de autos en México tiene el “freno de mano” puesto –con el contrabando y regularización de 2 millones 300 mil autos, en los últimos dos años–, está retomando velocidad en su nivel de ventas y podría alcanzar al cierre del año un total de 1.5 millones de autos vendidos.
Al sexto mes del año las ventas de autos aumentaron 8.3% ó 122 mil 929 y en el semestre tuvieron un incremento de 11.9% o 708 mil 650 unidades. Con tales cifras, el promedio de ventas mensual en lo que va del año es de 115 mil vehículos comercializados.
Se acumulan ya dos años consecutivos con tasas de crecimiento en ventas positivas y se proyecta que para el cierre de este año el crecimiento pudiera ser del 10%, respecto del año previo.
¿Cómo se explica este comportamiento en el mercado automotriz?
Guillermo Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Autos, menciona varios factores, pero destaca uno de ellos: que, en términos reales, los precios de los autos están bajando.
No es una simple apreciación personal del dirigente de la organización que aglutina a los concesionarios del país.
Se basa en los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con los datos que difundió el organismo de estadística para el mes de junio, el índice de precios de los autos aumentó 1.6 por ciento.
Ese nivel contrasta con el 4.67% que registró la inflación general.
Pero, además, refiere Rosales, el mayor ánimo y disposición para comprar autos por parte de los consumidores, tiene que ver con la creciente competencia en el mercado mexicano automotriz, la llegada de nuevas marcas y las promociones y plazos largos para pagar los financiamientos automotrices.
Además de la competencia entre las empresas automotrices, es muy importante la competencia entre los bancos y los financiamientos que ofrecen las empresas del sector, con créditos que van de los 48 a los 60 meses.
Su estrategia ha permitido diluir el impacto de las altas tasas de interés que se están registrando, con el 11% en la tasa de referencia de Banxico.
El financiamiento es el principal motor del mercado automotor.
Representa el 59% de las ventas totales. Si se excluye de ese porcentaje lo que corresponde a las adquisiciones que hacen las empresas; las dependencias gubernamentales, la participación del financiamiento en las ventas al menudeo sube casi al 69 por ciento.
Se observa también una mayor responsabilidad de los consumidores en el cumplimiento de sus compromisos que se refleja en una cartera vencida que apenas rebasa el 1 por ciento.
Adicionalmente hay que considerar, el aumento de los salarios, la recuperación del ingreso de las familias y la mayor creación de puestos de trabajo.
También se debe tomar en cuenta el aumento del gasto público del gobierno federal que por un lado se traduce en el mayor nivel de déficit fiscal registrado en los últimos años, pero por el otro lado se registra en una mayor capacidad de consumo de los individuos y familias.
Por el lado negativo, el factor que impide que la venta de autos en el mercado local sea mayor, sin duda es el de la regularización de los “autos chocolate”.
De enero del 2022 a hasta hace una semana, se registra el contrabando y regularización de más de 2 millones 300 mil vehículos.
El 50% de estos 2.3 millones se concentra en Tamaulipas, Chihuahua y Baja California.
Lo que se ha regularizado de vehículos ilegales en Tamaulipas, representa la venta de vehículos nuevos, ¡de 10 años!.
Otro obstáculo que ha tenido la venta de autos en el mercado nacional, es la falta de incentivos fiscales.
La deducibilidad en la compra de autos nuevos está en 170 mil pesos. Es la misma cantidad, en términos nominales desde el 2008.
Hoy el precio promedio de venta de un auto en México es de 520 mil pesos
El presidente de la AMDA sostiene que se necesita revisar la deducibilidad de los vehículos con una política de renovación y no solo como un instrumento de recaudación.
Atisbos
La tercera parte de los integrantes del gabinete de la virtual presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quedó muy lejos de la señal positiva que generó la primera entrega. En la segunda, a pesar del buen nivel académico y profesional de los designados, ya había deslucido. En esta última se registró más incertidumbre. Al tiempo.

