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Una muñeca mexicana muy internacional
Cristina Dorsett es una empresaria con 23 años de trayectoria en la industria del juguete mexicano. Con base en la calidad y esfuerzo ha hecho crecer su empresa y es la orgullosa creadora de la muñeca Frida Khalo, que distribuye en México y el mundo.
La industria del juguete mexicano ha sido golpeada por la introducción cada vez más desmesurada de productos asiáticos. Del 100% del sector nacional que existía hace poco más de dos décadas, ahora sólo queda 20%, advierte Cristina Dorsett, creadora de Muñecas Eny.
Esta empresaria es una de las pocas sobrevivientes de esta rama. A 23 años de distancia asegura que la base de su éxito, permanencia y conquista del mercado mundial se debe a su calidad y servicio que hoy ofrece a sus clientes.
Hace tres años, Muñecas Eny se convirtió en la primera empresa mexicana de la industria en ser aceptada para participar en la Feria Internacional del Juguete de Nuremberg, Alemania, y no sólo fueron integrados sino que fueron nominados al Premio a la Innovación por la muñeca Frida Khalo, de quien tiene licencia.
Eny comenzó como un sueño, relata su creadora, "empecé como cualquier pequeña empresa, con mis ahorros y una máquina incrustadora para ojos.
Toqué muchas puertas y no fue sino hasta 1991 cuando logré introducirme a Sanborns, mi primer cliente grande, con quien comenzamos a crecer".
La clave del éxito
"Lo que nos ha distinguido es la calidad y los diseños, hemos tenido muchos tropiezos, pero Eny ha sido una empresa exitosa con mucha suerte", reconoce la empresaria al asegurar que la suerte no se genera sola, "se logra con el amor que he trabajado todos mis diseños, mi calidad y servicio que hemos dado".
Cristina reconoce que cuando inició su negocio tuvo que enfrentarse a un "mundo de hombres", en el que pudo sobresalir gracias a su trabajo y al amor al mismo.
"Hacer lo que hago es mi vida y trabajar para dar alegría a los niños es maravillosos, me han tocado devaluaciones pero he trabajado mucho", sostiene.
De las devaluaciones se sobrepone con un servicio de calidad, asegura la creadora de la muñeca quinceañera al reconocer que se avecina una época difícil.
"Para mi las crisis siempre son oportunidades, tenemos que volvernos más creativos. Existe una competencia bárbara a nivel mundial, pero vamos a sobrevivir con nuestra calidad e innovación de producto".
Esta misma calidad ha hecho que Cristina pudiera vender sus productos tiendas Coppel, el Palacio de Hierro, Sears y exportarlos a JcPenney.
Actualmente Eny maneja una línea de muñecas regionales que están dirigidas más que nada a coleccionistas y que fueron la puerta de entrada para poder acceder a Frida.
Caracterizando una de sus muñecas regionales como Frida fue como la familia Khalo vio la calidad de su producto y como logró obtener su licencia para su fabricación.
Mantenerse en el mercado
"Lo importante no es llegar, sino mantenerse en el mercado", dice Dorsett al hablar de los retos como exportadora. Insiste que lo ha logrado gracias a su calidad.
El nuevo reto, comenta es seguir exportando. En la actualidad Muñecas Eny está cerrando tratos con una empresa española, lo que califica como "un gran salto para una empresa mexicana y una industria que está en decadencia, porque no hay apoyos para la industria del juguete y muy pocos apoyos para las PYMES".
"Este país solo saldrá adelante si nos unimos todos, gobiernos, partidos políticos y sociedad para crear empresas y generar riqueza mediante la generación de empleos productivos. De nada nos va a servir crear riqueza externa porque si no apoyan a las empresas mexicanas y nos unimos los mexicanos a crear productos mexicanos lo único que estamos haciendo es volvernos importadores", advierte la empresaria.
Para llevar por buen camino a su empresa dice transmitir el amor a su trabajo, "les digo que vamos a ser los mejores y que es nuestro trabajo, que siempre que tengamos un sueño lo persigamos y jamás desistir porque para mi no hay nada imposible en la vida", concluye.