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Acento Mexicano, de la tradición al éxito
Las artesanías nacionales decoran ya los hogares extranjeros. Acento Mexicano se ha encargado de producir y comercializar estos objetos entre los turistas, convirtiéndose en uno de los negocios más exitosos de nuestro país.
De inicio sólo buscó rescatar las artesanías mexicanas y promoverlas mediante su compra y venta entre los turistas nacionales y extranjeros que visitaban México.
Posteriormente cayó en la cuenta de que a través de estos productos podía rebasar fronteras y posicionar su negocio como uno de los más importantes en el país y el mundo en lo que se refiere a la producción y comercialización de artesanías.
Se trata de la empresa Acento Mexicano dedicada desde 1995 a comercializar artesanías y desde 1997 al diseño y producción de accesorios novedosos, de calidad y sobre todo, representativos de la cultura mexicana.
“La idea inicial era aportar un poco a la industria del regalo en México y que dejara de existir la artesanía de la lágrima en la que se le compra al artesano un producto por ayudarle. Quisimos vender un producto que fuera útil, que tuviera diseño y un toque muy, muy mexicano”, dijo en plática con El Economista, Juan Manuel Alvarado, director y fundador de Acento Mexicano.
Un producto que trasciende fronteras
Actualmente, sus productos adornan los hogares de familias en Sudáfrica, Brasil, Estados Unidos, Canadá y varios países de Sudamérica, por lo que Alvarado aseguró que ésta ha sido una de las principales fortalezas de la compañía.
“Son casi 12 años y la satisfacción ha sido muy importante, ya no sólo para mí, sino para todos los que trabajamos en Acento Mexicano, de ver que nuestros productos decoran casas en todo el mundo”, destacó el directivo.
Alvarado mencionó que el hecho de exportar, es un factor que contribuye a mejorar la calidad de los productos y a mantenerse a la vanguardia dado que el mercado extranjero es más exigente que el nacional.
“Después de esto nos ha quedado la experiencia de que lo que haces con los grandes clientes, lo puedes aterrizar con los más pequeñitos y así tener mucho éxito”, aseguró.
Resaltó que esto ha sido un factor que les ha ayudado a mejorar la calidad de sus productos y por lo tanto, enfrentarse a grandes competidores como lo son las compañías asiáticas.
Con valor agregado
Acento Mexicano ha basado su estrategia de negocios en su capacidad de respuesta, ya que independientemente de cuáles sean las especificaciones de los productos, siempre se surten en tiempo y forma.
Alvarado recordó una de las experiencias que recientemente ha hecho que su compañía capte el interés de una importante firma a nivel mundial. “En diciembre nos habló Coca-Cola porque necesitaba 25,000 regalos para sus trabajadores y requerían su entrega en un lapso máximo de tres semanas. Voltearon a nosotros, se dieron cuenta de nuestra capacidad y nos pidieron desarrollar una idea”.
El regalo consistió en un candelabro con una vela roja y con la silueta de una botella de la bebida en un empaque especial que fue distribuido a todos sus trabajadores.
“Coca-Cola se preocupó por comprar y autorizar y nosotros por todo lo demás. Este es un servicio que le brindamos al cliente y que le resulta muy interesante”, aseguró el emprendedor.
Y lo que viene
Juan Manuel Alvarado adelantó que en los próximos meses abrirán una nueva planta, que junto con la del Estado de México, buscarán satisfacer la demanda del mercado externo.
“Vamos a consolidar la exportación para tener una participación más importante en el extranjero, poner tiendas propias y llegar incluso a franquiciar el negocio”, detalló.
Para ello, ya se tienen definidas las estrategias. En el corto plazo, buscarán incrementar su participación en eventos internacionales, montar un centro de distribución en el extranjero en mediano plazo, y por último, uno más en Estados Unidos y Canadá.
El entrevistado, destacó que este éxito no hubiera sido posible sin el apoyo del Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext) y del Instituto del Emprendedor Mexiquense.
ccreyna@eleconomista.com.mx