Saldívar puso el triunfo en La México

Desde que se abrió de capa para realizar el quite que le correspondía luego de haber recibido dos puyazos el toro de Cayetano, Arturo Saldívar dio muestras de querer llevarse el triunfo en la segunda corrida de la Temporada Grande en la plaza México, las chicuelinas combinadas con tafalleras provocaron un sonoro olé en los tendidos y el diestro jalisciense sólo esbozó una ligera sonrisa.

Ataviado con un elegante traje de luces en azul profundo y plata con cabos en blanco, el torero avecindado en Aguascalientes esperó a Bienvenido de Jaral de Peñas, un noble burel que sobresalió por su clase y recorrido en el festejo y recibió los honores del arrastre lento a sus restos, para pegarle la larga cambiada de hinojos, lances a la verónica y contemplar cómo su cuadrilla saludaba en el tercio tras colocar con gran técnica las banderillas.

La faena de muleta fue escalofriante. Los estatuarios con el pase del imposible y el del campanario fueron coreados por un público que esperaba el triunfo grande; siguió con series por el lado derecho y luego de naturales con aguante, adornos como la dosantina y una tanda de bernardinas que intentó coronar con espadazo no lo suficientemente bien colocado, tuvo que usar el descabello, por lo que escuchó un aviso antes de la concesión del apéndice ante la petición mayoritaria.

En su segundo, un ejemplar soso y parado, abrevió para escuchar palmas tras un bocinazo.

Abrió plaza Pablo Hermoso de Mendoza, quien fiel a su costumbre dio cátedra del manejo de sus cabalgaduras ante ejemplares de Bernaldo de Quirós. A bordo de Barrabás, Berlín, Brindis, Disparate, Donatelli y Fusilero colocó rejones de castigo, banderillas y enceló a los dos toros de su lote. Le aplaudieron en suertes como la ‘Hermosina’, en la que lleva a su enemigo encelado mientras le cambia los lados con las ancas de su montura para terminar con una media vuelta que le fue muy coreada; cabriolas, el teléfono y otras ya conocidas por la afición. Sin embargo, erró con los rejones de muerte y silenciaron sus respectivas labores.

Por su parte, Leo Valadez confirmó su alternativa con el toro ‘Arrogante´, número 171 y 477 kilos de Jaral de Peñas. En su lote el diestro hidrocálido dejó constancia de variedad y técnica con capote y muleta y escuchó palmas luego de pasaportar a cada uno de ellos.

En cuanto al torero español Cayetano Rivera, tuvo un discreto en su regreso a la Monumental de Insurgentes, sólo detalles aislados y silenciaron su quehacer en los dos toros que le correspondieron.

Macías a hombros en su reaparición en Pachuca

Arturo Macías, en su regreso tras sufrir una cornada en el cuello, se alzó como triunfador tras cortar tres orejas el sábado en el festejo a la Usanza Charra que conmemoró el 39 aniversario de la plaza Vicente Segura de Pachuca para salir en hombros al finalizar el festejo, en el que Uriel Moreno El Zapata y el rejoneador Emiliano Gamero obtuvieron un apéndice cada uno y se lidiaron toros de Real de Saltillo y Pastejé.

erp