Libros para niños, maquinitas del tiempo

La lectura es uno de esos placeres al alcance de casi todo el mundo: no requiere un lugar específico ni se rige por horarios; a veces puede ser un goce solitario pero, en ocasiones, también puede ser un acto social o comunitario; puede ser barato o caro aunque, si está dispuesto a desplazarse hasta una biblioteca o sala de lectura, no hay que desembolsar ni un solo peso. Mantiene la mente ágil y reivindica concentración.

Un libro es una maquinita del tiempo que guarda el pasado, deambula en el presente y profetiza el futuro creando mundos alternos y personajes de carne y hueso. Además, propicia seres humanos juiciosos, emotivos, viajeros, críticos, empáticos, sensibles, autónomos, pensantes. ¿Se le puede pedir más a un simple objeto?

Si se convenció con alguno de estos beneficios, aproveche el pretexto del día del niño y lleve a su niño más cercano a una librería. Lo más probable es que allí encuentren actividades pensadas especialmente para ellos, después déjelo deambular para que escoja el libro que llame su atención. O bien, si prefiere darle una sorpresa, aquí tiene unas sugerencias:

Centígrados y paralelos de Víctor Solís, Océano Travesía, $160.

Este libro álbum relata con imágenes (en este caso fotografías) el viaje de un grupo de pingüinos que van desde la Patagonia hasta el ominoso muro que separa a México de Estados Unidos. Desde los glaciares impolutos hasta los terrenos más tergiversados por el hombre. Un libro, una reflexión.

El cuaderno de las pesadillas, texto de Ricardo Chávez Castañeda ?con ilustraciones de Israel Barrón, FCE, $109.

Es extraña la fascinación que provocan las historias de miedo en los niños, sin embargo, es real; quizá porque a través de ellas ven sus temores reflejados, idean maneras para sobrellevarlos o desaparecerlos o, tal vez, simplemente porque disfrutan al aflojar el cuerpo cuando termina el cuento. Cualquiera que sea el caso, aquí encontrarán muchos cuentos extraños, pesadillescos y sobrenaturales.

Barba Azul, adaptación del texto de Charles Perrault con ilustraciones ?de Christoph Wischniowski, FCE, $135.

Y si de textos terroríficos se trata, el clásico Barba Azul no se queda atrás. Con magníficas ilustraciones se relata la historia de la bella mujer que, picada por la curiosidad, desobedece las indicaciones de su esposo y descubre el espeluznante secreto del marido. Este librito volverá a traer a colación la vieja polémica de por qué los cuentos clásicos para niños son clásicos.

La cosa horrible, texto de Keren Chacek con ilustraciones de Julián ?Cicero, Axial, $146.

¿Qué niño no ha sentido la necesidad de ir al cuarto de sus papás en la noche?, o ¿cuál no ha pedido que le dejen encendida la luz porque tiene miedo a la oscuridad?

El protagonista de este libro álbum no es la excepción y, cada vez que hay que apagar las luces, se cubre con las sábanas y espera que no pase nada, pero… Se le enfrían los pies, señal de que algo está por suceder...

Las aves. Introducción a la música de concierto. Selección musical y textos de Ana Gerhard, con ilustraciones de Cecilia Varela, Océano Travesía, $245.

Este libro-disco es una introducción a la música y un deleite para ojos y oídos. Recopila distintas obras musicales inspiradas en las aves y sus cantos, que van desde el Renacimiento hasta el siglo XX. Audio y texto se complementan, ofreciendo breves introducciones a las obras, así como pequeñas guías de audición que permiten identificar intenciones. Cada obra va acompañada, además, por una semblanza y un retrato del compositor. Las ilustraciones de Cecilia Varela -serenas, sugestivas, ingenuas- evocan paisajes atmosféricos relacionados con las aves, los compositores y sus lugares de procedencia. Al final del libro hay un glosario y una cronología.

Migrar, ilustración de Javier Martínez Pedro con texto de José Manuel Mateo, Ediciones Tecolote, $280.

A la manera de las pinturas hechas sobre papel amate, Migrar nos relata la historia de un niño y su familia que deben dejar su hogar para buscar mejores condiciones de vida. Para leer Migrar, hay que desplegarlo y dejarse seducir por la minucia de la ilustración, hay que identificar al niño narrador que se repite de escena en escena y acompañarlo en su recorrido hasta que cruce la frontera. Este libro obtuvo el Premio Bologna Ragazzi (Nuevos Horizontes 2012 y se agotó). Acaba de salir la segunda reimpresión y no vale la pena quedarse sin él.

La tienda de animalhombres del señor Larsen, textos de Daniel Monedero ?con ilustraciones de Aitana Carrasco, CIDCLI, $139.

En la antigüedad, los bestiarios se hacían como libros de consulta y adoctrinamiento, allí se dibujaban y describían los animales que se conocían y de los que se tenía noticia. Por supuesto que en ellos aparecen sirenas, ninfas, centauros y demás seres imaginarios. Afortunadamente, siempre aparecen libros que no nos permiten olvidar a esos animalhombres y animajetos, y nos regocijan al dejarnos ver el interior de la tienda, museo o gabinete de curiosidades del señor Larsen. Ésta podría ser su única oportunidad para conocer jiraféminas, gallombres, al calamar de las palabras (en su tinta) o a la vacamundi.

El ciempiés y la araña, de Juan Gelman, con ilustraciones de Eleonora Arroyo, Conaculta, $180.

Una pequeña fábula en la que los protagonistas son un ciempiés, una araña y una simple pregunta. Las ilustraciones, el tono y el final del libro le dejarán una sonrisa.