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Felipe Cazals decide ?no volver a hacer cine
De manera sorpresiva, el director de Canoa aseguró que dejará de dirigir ante la llegada del cine digital.

El cineasta Felipe Cazals, piedra angular del cine mexicano y director de joyas como Las poquianchis, El apando y Canoa, aseguró en un e-mail que deja de filmar películas.
Desde hace algunos meses estoy alejado del cine nacional de forma definitiva. Así pues, la partida ha concluido para su servidor, pero habrá larga vida para el cine mexicano. No lo dude. Saludos cordiales , escribió a este periodista.
Por supuesto que pregunté los motivos de su decisión, a los que Cazals respondió de manera firme: Comprendo que sus preguntas las dictan su oficio de periodista. Responderé a ellas en la inteligencia de que, de ser reproducidas, usted respetará su integridad. Advierto también que no volveré sobre el tema .
He aquí (íntegro) lo que escribió:
Fui formado durante más de cincuenta años con el cine fotoquímico. Proceso que por excelencia no ha concluido aún con sus infinitas posibilidades. Signo de los tiempos, de la pedante tecnología, y de la premura del consumismo, hoy, el cine digital es una realidad irreversible. No es lo mío -en donde fuiste Caballero no serás escudero-. En consecuencia, dedicaré mi tiempo restante a actividades paralelas relacionadas con mis películas anteriores .
Apenas en abril, Felipe Cazals había intercambiado mails con este reportero solicitando réplica a una nota titulada Revisarán apoyos estatales al cine mexicano (El Economista 14/04/13), donde aseguró que la calidad de las películas no está asociada a las preferencias del consumo masivo.
No tendríamos que hablar aquí de calidad. El resultado en taquilla no tiene relación directa con ese concepto. ¿Cómo se califica la calidad? Por medio de sistemas de manufactura, la calidad se manifiesta en la pantalla, no en la taquilla .
Para el creador, el cine mexicano ha sufrido un descenso en la preferencia en taquilla porque sus contenidos o historias no son atractivos a ese consumidor masivo. Este gusto masivo ha sido inducido, mercadeado e impuesto .
Ahora, con su decisión de dejar de filmar (su última cinta fue Ciudadano Buelna), deja un hueco enorme en el cine. Se va un cineasta combativo, polémico, que retó al Estado, sufrió censura y siempre buscó temas de denuncia y sociales que tuvieran impacto en el espectador.
¿Quién es?
Felipe Cazals nació el 28 de julio de 1937. Al inicio de los años 60, recibió una beca para estudiar cine en el Institut des Hautes Études Cinématographiques de París, escuela que abandonó luego de algún tiempo.
A su regreso a México, colaboró con el programa de televisión La hora de Bellas Artes para el que realizó sus primeros cortometrajes.
Con Arturo Ripstein, Rafael Castanedo y Pedro F. Miret, fundó, a finales de los años 60, el grupo Cine Independiente.
En 1970, con Emiliano Zapata, ingresó a la industria.
A mediados de los años 70 realizó, casi al hilo, tres títulos fundamentales del cine mexicano de la década: Canoa, El apando y Las Poquianchis.
Posteriormente, dejó ver su madurez como director en Los motivos de Luz, Las inocentes, Su Alteza Serenísima, Digna, hasta el último aliento y con Las vueltas del citrillo, que recibió seis Arieles.
En el 2004 fue homenajeado por el Festival Internacional de Cine en Guadalajara, donde recibió el Mayahuel de Plata. También, la Medalla de Plata de la Filmoteca de la UNAM.
En el 2006 le fue otorgada la Medalla Salvador Toscano.
En el 2007 obtuvo el Premio Nacional de Ciencias y Artes, máxima distinción que otorga el Estado mexicano.
En el 2010, la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, en su 52 Entrega, le otorgó el Ariel de Oro.
vgutierrez@eleconomista.com.mx