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Activismo y religión como forma de vida
La familia LeBarón, de nacionalidad mexicana y estadounidense, ha sido insignia de la lucha contra la inseguridad y los grupos delictivos en Chihuahua.
La familia LeBarón, de nacionalidad mexicana y estadounidense, ha sido insignia de la lucha contra la inseguridad y los grupos delictivos en Chihuahua. Es por ello que el ataque del pasado lunes, cuando nueve de sus integrantes fueron asesinados, no es el primer suceso al que se han enfrentado.
La familia, de religión mormona, habita en la región de Nuevo Casas Grandes, Chihuahua, y en la comunidad de Las Moras, Sonora, donde se dedican a producir la tierra; poseen huertas nogaleras, tienen ganado y hectáreas de pastizales.
Se ubica entre regiones con alta presencia de grupos delictivos que constantemente sostienen enfrentamientos en comunidades de Ciudad Cuauhtémoc; Creel-Bocoyna; Guazapares y Chínipas de Almada.
“En esta región donde pasaron los hechos lamentables, es una frontera entre Sonora y Chihuahua, donde se están peleando los grupos delincuenciales la plaza, y lamentablemente gente que se dedica durante muchos años al trabajo del campo y tiene propiedades está en conflicto.
Hoy vivimos un hecho muy doloroso, muy lamentable que privó de la vida a mujeres y niños inocentes que no tienen nada que ver con la actividad delincuencial, y que es gente de familias que se dedican a producir la tierra, que tienen huertas nogaleras, tienen ganado, pastizales”, narró el exdiputado federal por Chihuahua, Alejandro Domínguez.
En el 2009, la comunidad LeBarón en Nuevo Casas Grandes cobró atención nacional debido a una serie de sucesos en la que sus pobladores fueron víctimas de graves problemas de inseguridad. El 2 de mayo de ese año fue secuestrado Erick LeBarón, de 17 años, y sus captores exigieron por su liberación 1 millón de dólares. Sin embargo, debido al activismo de la familia LeBarón, las autoridades lograron la liberación el 10 de mayo.
Desde entonces, los habitantes de la comunidad hicieron diversas manifestaciones por la creciente inseguridad en la región. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la población total de LeBarón es de 1,051 habitantes, de los cuales 496 son hombres y 555 son mujeres.
Sin embargo, las agresiones contra la familia no cesaron. El 6 de julio del 2009 fueron secuestrados y posteriormente asesinados Benjamín LeBarón y Luis Widmar Stubbs, miembros de la comunidad, y sus raptores hicieron pública su venganza por el activismo que realizaban en contra de la inseguridad.
Esto llevó a que Julián Lebarón se uniera en el 2011 al Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad que encabezó el poeta Javier Sicilia, mediante el cual hicieron recorridos por el norte y el sur del país para exigir a los tres niveles de gobierno una solución al problema de los homicidios, la desaparición y secuestro de personas, entre otros flagelos más.
La familia LeBarón, que en Estados Unidos era miembro de una rama fundamentalista de los mormones, llegó a Chihuahua en 1955, al negarse a abandonar la poligamia como ordenaba su religión. La familia fundó la Iglesia del Primogénito de la Plenitud de los Tiempos en la comunidad LeBarón.