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Tu libertad financiera puede estar más cerca de lo que crees (Parte 1 de 2)
Algunas pocas veces he escrito en esta columna acerca del concepto o movimiento FIRE, el acrónimo de “Financial Independence Retire Early”, que en español significa “Libertad Financiera, Retiro Temprano”.
Como su nombre lo indica, la idea es simplemente alcanzar la libertad financiera en una etapa de la vida temprana, cuando uno sigue siendo joven. Algunos lo logran a mediados de sus treintas o principios de sus cuarenta años.
Es importante mencionar: llegar a esta meta no significa dejar de trabajar. Muchos deciden continuar –aunque ya no lo necesiten– simplemente porque lo disfrutan. Pero la libertad financiera les da opciones que antes no tenían.
¿Alguna vez te has sentido a disgusto en tu trabajo y has tenido ganas de renunciar, pero no lo haces porque necesitas el dinero? A mí definitivamente me ha pasado y no es nada agradable. ¿Te gustaría dedicarte a otra cosa, pero tienes miedo a intentarlo por tus compromisos económicos?
Si tuvieras libertad financiera, no tendrías que pensarlo.
Ahora bien, ¿Qué es libertad financiera? Qué bueno que preguntaste. Significa simplemente lograr un patrimonio que te permita mantener tu mismo nivel de gastos por el resto de tu vida, sin tener que volver a trabajar.
No estamos hablando de hacerte multimillonario y de comprar cosas que hoy no puedes pagar. Pero sí tener una cantidad suficiente para mantener tu nivel de vida actual de manera indefinida.
¿De cuánta cantidad de dinero estamos hablando? ¿Cuánto dinero necesitas para retirarte o para alcanzar tu libertad financiera?
Para contestar eso hay que referirnos a una regla que usan muchos asesores financieros, llamada la regla del 4%. Básicamente establece que una persona que se retira, puede disponer de 4% de su patrimonio cada año (ajustado a la inflación) sin temor de que el dinero se le acabe, pero siempre y cuando ese dinero esté invertido adecuadamente.
Esta regla se le atribuye a Bill Bengan, un asesor financiero en el Sur de California, quien concluyó que, si el dinero está invertido en un portafolio 50/50 (50% en acciones y 50% en bonos estadounidenses de plazos intermedios), no existía ningún caso histórico en el cual se acabaran los fondos antes de 33 años.
Sin embargo, para ello usó datos de retornos de acciones y bonos estadounidenses en un periodo de 50 años (desde 1926 hasta 1976).
Aunque muchas personas la apoyan, también hay muchos estudios que la critican, porque los rendimientos que han tenido ambas clases de activos en las últimas décadas, han sido muy distintos a las previas (particularmente los bonos estadounidenses, que en los últimos 20 años han pagado mucho menos que la inflación - aunque hoy en día sí pagan más por el alza en las tasas de interés, lo cual parece coyuntural).
Sin embargo, también hay muchos estudios que la respaldan y sigue siendo una regla muy utilizada. Particularmente me gusta: si tu dinero crece al menos la inflación, se acabará en 25 años, pero si lo mantienes invertido y logras un crecimiento 4-5 puntos porcentuales arriba de la inflación, difícilmente te lo vas a acabar.
¿Cómo se aplica la regla del 4% para determinar cuánto dinero necesitas para alcanzar tu libertad financiera? Divides la cantidad que gastas hoy entre 0.04 (4%), lo cual es exactamente lo mismo que multiplicar tus gastos por 25.
En otras palabras, si tus gastos anuales son de 200,000 pesos, significa que necesitas 5 millones de pesos para alcanzar tu libertad financiera a cualquier edad. Esa debería ser tu meta de ahorro para el retiro, pero también es tu meta de ahorro si quieres un retiro temprano que te dé opciones y alternativas para vivir la vida que quieres.
Sí, es mucho dinero. Las personas que quieren lograr una libertad financiera y un retiro temprano (FIRE) hacen de esto su prioridad: reducen sus gastos de manera significativa y ahorran un porcentaje elevado de sus ingresos.
En la siguiente colaboración te voy a dar un ejemplo que quizá te inspire a intentarlo.