Lectura 3:00 min
Jóvenes, el sector más expuesto al crimen
La Secretaría de Gobernación (Segob) alertó que los jóvenes ya son el sector de la población con más exposición a ser víctimas y victimarios.

La Secretaría de Gobernación (Segob) alertó que los jóvenes ya son el sector de la población con más exposición a ser víctimas y victimarios.
En su Programa Sectorial 2013-2018, la Segob precisó que en el caso específico de los jóvenes, se han convertido en las principales víctimas y los principales agresores , pues detalló que del total de homicidios juveniles ocurridos entre el 2000 y el 2010 ascendió a aproximadamente a 53,000 personas, es decir, los jóvenes de 10 a 29 años representaron 38.2% de los homicidios en México en ese periodo. Asimismo, del total de homicidios juveniles del 2000 al 2010, 43.4% se produjo en el 2008 y el 2010. En lo que se refiere a los jóvenes como principales agresores, la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2013 consigna que 33.5% de los homicidios fue cometido por jóvenes de 25 años o menos.
Otro segmento de la población que ha estado expuesto a la violencia y la delincuencia son los niños, niñas y adolescentes. Como muestran los datos de la tasa de mortalidad por homicidio en la población de cero a 17 años, ésta ha aumentado de 2.1 por cada 1,000 en el 2006 a 3.6 en el 2010. Al desagregar los datos por grupos de edad, se observa que en el caso de población de 15 a 17 años, la tasa pasó de 6.5 por cada 1,000 en el 2006 a 14.4 en el 2010 , precisa el reporte de la Segob.
Reconoció que la falta de oportunidades laborales y la desocupación se han convertido en factores precursores de la violencia y la delincuencia, ya que entre el 2006 y el 2012 la desocupación promedio en México fue de 4.6 por ciento.
La falta de oportunidades educativas y la deserción escolar, admite, pueden convertirse en un factor de riesgo. La falta de oportunidades educativas puede llevar a las personas a considerar a la delincuencia como una alternativa .
Otro factor de riesgo de la violencia es el nivel de desconfianza ciudadana, que impide la solución pacifica de los conflictos entre comunidades.
En gran parte del país, las relaciones interpersonales se caracterizan por la desconfianza, la falta de respeto y la intolerancia, en los ámbitos familiar, vecinal y comunitario, de tal suerte que los conflictos se convierten en riñas(...). La insuficiencia o deterioro de espacios públicos para la convivencia es un factor que incide en el debilitamiento del tejido social. , refiere el documento.
jorge.monroy@eleconomista.mx