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Nuevos suicidios en empresas francesas
Cuatro trabajadores de las empresas Thales, GDF-Suez, PSA y Renault se suicidaron en las últimas semanas, sumándose a los 25 empleados de France Telecom, que se quitaron la vida desde febrero de 2008.
París.- Cuatro trabajadores de las empresas Thales (defensa aeronáutica), GDF-Suez (gas-energía), PSA y Renault (automotor) se suicidaron en las últimas semanas, sumándose a la serie negra del gigante France Telecom, donde 25 empleados se quitaron la vida desde febrero de 2008.
Un empleado del grupo Gas de Francia (GDF-Suez) se quitó la vida a principios de octubre fuera de la empresa, indicaron el lunes fuentes gremiales.
El empleado, un padre de familia de 38 años, se quitó la vida en la región del Aveyron (sur de Francia) pero no lo hizo en su domicilio, indicó un delegado de la CGT, Eric Dulon.
Una empleada de 45 años del grupo Thales, que trabajaba en una planta cerca de Rennes (noreste) se suicidó el viernes en su casa.
El sindicato CFTC vinculó directamente su suicidio con las condiciones de trabajo en esa empresa de Chateauborg que fabrica pulgas electrónicas.
"El sucidio se debió a las condiciones de trabajo. La presionaron. Hace seis meses, redujeron su calificación y tuvo problemas profesionales importantes", indicó un delegado gremial, Antoine Marcantoni.
Un empleado de unos 40 años del constructor automovilístico francés PSA (Peugeot) de Yvelines, afueras de París, se quitó la vida el viernes en su lugar de trabajo, anunció la dirección del grupo.
El hombre fue hallado sin vida por sus colegas.
En 2007, seis empleados de PSA se suicidaron. Dos de ellos en la fábrica de Mulhouse (este).
El 8 de octubre, un ingeniero de 51 años que trabajaba en una planta del constructor automovilístico Renault, también en Yvelines, se quitó la vida en su domicilio.
Tres empleados de Renault se suicidaron a fines de 2006.
Desde febrero de 2008, 25 empleados del gigante francés de las telecomunicaciones, France Telecom, se quitaron la vida, algunos de ellos en su lugar de trabajo.
Los sindicatos de France Telecom atribuyeron los suicidios a la gestión empresarial, a la presión provocada por la movilidad y las reestructuraciones provocadas por la crisis.
