En Suecia, la gran mayoría de la gente trabaja desde su casa

Mientras que la mayoría de los países europeos ordenaron estrictas medidas de cuarentena, cierre de fronteras y comercios para frenar la pandemia del Covid-19, Suecia apuesta por lograr la inmunidad colectiva y  por una estrategia flexible donde el día a día trascurre con “normalidad”.

La embajadora de Suecia en México, Annika Thunborg, aseguró que su país ha optado por una estrategia sustentable de largo plazo que se adecúa a las condiciones del país protegiendo a la población más vulnerable y sin afectar a la economía.

—¿No tomar medidas drásticas de confinamiento seguirá siendo una opción sostenible a largo plazo?

—En Suecia, el gobierno ha optado por tomar decisiones basadas en la ciencia, lo que tiene un amplio respaldo político. Hay coincidencia entre los expertos de salud en todo el mundo que no se puede combatir una pandemia a través de un cierre completo de las fronteras. Lo que funciona en cada país es que la población siga las reglas: lavar las manos, evitar el contacto físico, mantener sana distancia, proteger y cuidar a la población vulnerable.

Se puede decir que la estrategia ha funcionado hasta ahora. No hemos visto problemas de contagio, por ejemplo, en las escuelas, todas siguen abiertas. Hay recomendaciones enérgicas para que la población se quede en casa, si tienen algún síntoma, aunque sea leve. Por supuesto, nuestro sistema de bienestar lo permite: tenemos políticas sociales que facilitan que las personas se puedan quedar en casa sin perder su nivel de ingreso, básicamente Suecia es un estado de bienestar inclusivo.

Lo que preocupa ahora a muchos países es cómo se podrá volver a una vida normal, paso a paso sin causar otra vez un aumento en infecciones y fallecimientos. No tenemos la misma preocupación en Suecia porque no hemos adoptado medidas tan drásticas. Hemos adoptado una estratégica sustentable, de largo plazo, nuestras recomendaciones van a durar por mucho tiempo.

—¿Hay un crecimiento en la tasa de mortalidad en su país, la estrategia de confianza en los ciudadanos cómo ha contribuido?

—Sí, tenemos una tradición basada en la confianza entre ciudadanos (uno a otro), y entre ciudadanos y gobierno lo que significa que normalmente es suficiente dar recomendaciones y consejos con la expectativa de que los ciudadanos las sigan. Lo que hemos visto en esta crisis es que la gran mayoría de los ciudadanos, igual que las empresas, sí han seguido las recomendaciones. Hay cifras que muestran por ejemplo que la mayoría de los ciudadanos trabajan desde casa, lo que es fácil en Suecia, porque el teletrabajo ya era común antes de esta pandemia.

—¿Tendría un gran impacto el cierre de comercios o la productividad desde el home office?

—Tenemos autoridades y agencias gubernamentales independientes en Suecia, es decir, en esta crisis el primer ministro y su gobierno acatan las recomendaciones de los expertos de salud, de los científicos y las autoridades. Sin embargo, la estrategia sueca además tiene un aspecto político: el gobierno está balanceando intereses diferentes: las consecuencias económicas, la capacidad del sistema de salud, mantener recursos suficientes para que se pueda cuidar y proteger a los grupos vulnerables, particularmente a las personas que tienen más de 70 años de edad que constituyen el 16% de la población sueca.

Creemos que hasta ahora hemos adoptado una estrategia sustentable, de largo plazo, que va a durar por mucho tiempo, porque tomamos la crisis, la pandemia, muy en serio. Y todo el tiempo evaluamos la situación, el gobierno toma decisiones modificadas, adaptándolas a los cambios que vemos en la sociedad. Por ejemplo, tenemos inspecciones de autoridades en todo el país, analizando si tengamos que modificar las recomendaciones.

Hasta ahora, si estamos balanceando las prioridades diferentes bastante bien.

—¿En qué se diferencia la estrategia sueca del resto de los países?

—No hay grandes diferencias entre Suecia y otros países. Nuestras prioridades son: salvar vidas, limitar el contagio, proteger a las personas vulnerables. Las medidas adoptadas son adecuadas para las condiciones de la sociedad sueca, cada país tiene que adoptar medidas adecuadas para sus condiciones.

kg