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Datos económicos de EU impactan en cruce GBP/USD

Si los datos macroeconómicos en Estados Unidos mantienen su evolución positiva, los mercados continuarán ponderando al dólar en contraposición a la libra y el euro. El cruce GBP/USD se encuentra en sus niveles mínimos de marzo.

Publicado: 11.07.2013 - 01:20

El cruce de la paridad GBP/USD comenzó el año con una fuerte tendencia a la baja. La cotización descendió en forma sostenida desde 1.62694 hasta 1.4830 en tan sólo tres meses, lo que representó una caída en términos porcentuales de 8.84 por ciento.

Esta tendencia se originó principalmente debido a que la economía británica no estaba evolucionando de manera positiva, ya que los datos macroeconómicos resultaron lejos de lo deseado.

Además, el Banco de Inglaterra mantenía su tasa de referencia en niveles extremadamente bajos y estaba haciendo compra de activos, mientras que a la par los precios subían considerablemente, por lo que no existía demasiado margen de acción para que dicho banco tomara medidas encaminadas a cristalizar la recuperación económica.

A partir de marzo, los datos macroeconómicos comenzaron a mejorar y por consiguiente el cruce logró estabilizarse por encima de 1.5 dólares por libra, e incluso a mediados de junio el cruce alcanzó niveles de 1.575 ante la secuencia de datos optimistas y buenas perspectivas que comenzaban a tener los inversores sobre la economía británica.

Todas esas expectativas se desvanecieron luego de que el Banco de Inglaterra anunciara al igual que el Banco Central Europeo (BCE) que las tasas de interés se mantendrían en niveles bajos por un extenso periodo de tiempo.

Este anuncio produjo un fuerte cambio de expectativas en el sentido de que los inversores tenían expectativas positivas de la economía británica y por tanto, que el Banco de Inglaterra comenzaría a deshacer su política monetaria expansiva en un periodo cercano. El anunció impactó muy fuerte en los rendimiento de los bonos soberanos y por supuesto, debilitó a la divisa británica.

Cabe preguntarse por qué el anuncio del BCE y del Banco de Inglaterra de comprometerse a mantener las tasas en niveles bajos por un periodo extenso en un momento en que la situación no está tan comprometida como en los años pasados.

FED, FACTOR DE DECISIÓN

La explicación se encuentra en los anuncios que semanas atrás hizo el titular de la Reserva Federal, Ben Bernanke, sobre los próximos pasos de la Fed sobre la compra de activos.

Recordemos que dijo que para fines de 2013 la Fed bajará el ritmo de compra de activos mensuales y que para mediados de 2014 dejaría de comprar activos. Luego de este anuncio, el mercado interpretó que la Reserva Federal comenzó su estrategia de salida de la política monetaria expansiva en la que se embarcó en el año 2008 con el inicio de la crisis financiera en dicho país.

El impacto fue muy fuerte en el precio de los activos, sobre todo en los rendimientos de los bonos de largo plazo, como con la principal divisa mundial, el dólar. Pero el impacto de estos comentarios no sólo melló en el rendimiento de los activos norteamericanos, impactó también en el rendimiento de los activos en todas partes del mundo debido al alcance económico y financiero de la economía estadounidense.

Es así que los rendimientos de los bonos de los países en problemas como España e Italia subieron, algo que no es para nada deseado por las autoridades europeas que han hecho un esfuerzo muy grande para que dichos rendimientos no alcancen niveles insostenibles, ya que si eso sucede estos países tendrán serios problemas de financiación.

Para contrarrestar este impacto es que Mario Draghi y el Banco de Inglaterra anunciaron el compromiso de bajas tasas de interés.

En definitiva, si los datos macroeconómicos en Estados Unidos continúan evolucionando en forma positiva, la Fed hará lo que anunció y por consiguiente, el mercado continuará ponderando al dólar en contraposición a la libra y el euro. En particular, la paridad GBP/USD se encuentra actualmente próximo al mínimo de marzo 1.4830 y es el principal soporte a quebrar del cruce, este quiebre lo vemos altamente probable.

El autor es analista en Saxo Capital Markets.

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