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Manuel Felguérez, transformador del rostro público mexicano
Gestores culturales y recintos reconocieron el trabajo del maestro zacatecano para romper con el tradicionalismo artístico y sentar las bases de la libertad del arte contemporáneo en México.
Foto: Twitter Alejandra Frausto
Lo noche de este domingo falleció a los 91 años el pintor y escultor abstracto zacatecano Manuel Felguérez, uno de los creadores plásticos más destacados de nuestro país en el siglo XX, figura emblemática de la Generación de la Ruptura, a partir de la cual se rompió con el discurso tradicionalista mexicano en el arte y generador de una obra que se volvió emblemática en el país. Le sobreviven su esposa Mercedes Oteyza y sus hijas Karina y Patricia Felguérez Rohde.
La noticia fue difundida por el gobernador de Zacatecas, Alejandro Tello, la mañana de este lunes:
“Hoy Zacatecas y México están de luto, hemos perdido a un hombre excepcional y a uno de los mayores exponentes del arte abstracto en el mundo: el maestro, pintor y escultor Manuel Felguérez Barra, figura clave en el desarrollo de arte contemporáneo, cuya obra y legado han sido fundamentales para la renovación radical de la cultura”.
El pésame y reconocimiento para el trabajo fundamental de Felguérez no se hicieron esperar en las redes sociales. La secretaria de Cultura federal, Alejandra Frausto Guerrero, calificó al finado como un “artista total”.
“Su legado es vasto y diverso, su obra, reconocida mundialmente, nutrió la obra de otros artistas. Generosa y extraordinaria persona, entrañable. Mi sentido pésame y acompañamiento a su familia, en especial a Meche”, escribió.
Cuauhtémoc Medina, curador en jefe del Museo Universitario Arte Contemporáneo (MUAC), donde desde el pasado 7 de diciembre se alojaba la exposición retrospectiva “Trayectorias”, en el marco del 90 aniversario del maestro zacatecano, proyectada para exhibirse hasta octubre próximo, y recinto al que donó 38 piezas y su archivo, escribió:
“Manuel Felguérez fue un pintor inagotable y el vocero de la libertad artística. Además era un sol. Extrañaremos su energía y gozo, la forma en que a los 91 años desafiaba la escala de sus batallas de superficies y gestos, cuerpos y escrituras veladas. Mi pésame a Mercedes y todos”.
El escritor y coordinador de Difusión Cultural de la UNAM, Jorge Volpi, explicó que “fue una de las figuras clave del arte en México, incombustible, siempre transformándose y siempre fiel a sí mismo, brillante y gentil, lamento mucho su pérdida. Su última gran exposición aún está en el MUAC, donde festejó sus 90 años. Mi pésame a Mercedes”.
Lo propio hizo Enrique Márquez, director ejecutivo de Diplomacia Cultural de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), quien además recordó que en 2007 se realizó la instalación en el cruce entre Paseo de la Reforma y Avenida Juárez, en el centro de la Ciudad de México, de las esculturas de Felguérez “Puerta 1808” y “Fuente de la República”, como preámbulo de las celebraciones por el bicentenario del inicio del movimiento de Independencia en el país y el centenario de la Revolución, convertidas hoy en día en obras emblemáticas de nuestra urbe.
Otras instituciones como el Patronato de Arte Contemporáneo también despidieron y elogiaron el trabajo del maestro:
“Innovador, experimentador, grande e infatigable. Nos despedimos con tristeza y admiración de Manuel Felguérez (1928-2020), quien fue implacable en su búsqueda de libertad artística”.
La directora del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBAL), Lucina Jiménez, expresó:
“Gran exponente de la generación de la Ruptura, impulsor del arte abstracto y de espacios museísticos importantes de Mexico, promotor de la gráfica contemporánea. Un ser generoso y prolífico, cuya memoria honraremos. Abrazos a Meche, su familia y amigos”.
La huella de Manuel Felguérez será indeleble en el país y a nivel mundial. Su obra permanece, más que en colecciones privadas, en el ámbito público y en espacios culturales emblemáticos.
Además de las obras en Paseo de la Reforma mencionadas, entre las piezas públicas del finado están “Barco México 68” en el Jardín Escultórico del Museo de Arte Moderno; “La puerta del tiempo”, en la Rectoría General de la Universidad Autónoma Metropolitana; “La llave de Kepler”, en el Espacio Escultórico de Ciudad Universitaria, de la UNAM; "Observando a la Osa Mayor", en el Parque Bolívar, en Chihuahua, y el “Muro de calaveras”, inspirado en un tzompantli, cercando el perímetro del Museo Nacional de Antropología, entre muchas obras que han sido testigo y rostro de la modernidad de nuestro país.
