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Schumi regresa a casa a retomar credibilidad
En su país, en el marco del GP de Alemania, décima parada del calendario Fórmula Uno (F1), el siete veces campeón buscará convencer a los directivos de su escudería, Mercedes GP, de darle asiento para el próximo año.
Michael Schumacher anhela un domingo de esplendor, como esos de la década y siglo pasados que le hagan recuperar su confianza. En su país, en el marco del Gran Premio (GP) de Alemania, décima parada del calendario Fórmula Uno (F1), el siete veces campeón buscará convencer a los directivos de su escudería, Mercedes GP, de darle asiento para el próximo año.
Tras su regreso a la F1 en el 2010 y como toda leyenda del deporte que sale del retiro y anhela la cúspide de lo que fue, Schumi defraudó a quienes creyeron que sería el mismo de las 91 victorias en 276 carreras.
Con un contrato hasta el 2012 y 7 millones de euros por temporada, el lugar del piloto europeo no estaría garantizado debido a sus discretos resultados; además, su escudería impulsaría en mayor dimensión al también alemán Nico Rosberg. También influye la falta de motivación por seguir corriendo que ha manifestado el expiloto de Ferrari. Aún con ello, el conductor de 42 años quiere cumplir el acuerdo.
En la actual temporada Michael ocupa la décima posición con 28 unidades, lejos de su coterráneo, monarca vigente y líder actual, Sebastian Vettel (204), de Red Bull. La contienda anterior, la de su vuelta, concluyó con 72 puntos (sitio nueve).
Desde 1992 en que Schumacher compite en el GP de Alemania, ganó en cuatro oportunidades (1995, el 2002, el 2004 y el 2006), dos segundos puestos (1993 y 1997), así como el tercer escaño en 1992.
Su aliciente para esta carrera es mostrarse ante su público y pasar por la curva que lleva su nombre.