Estamos sólidos para enfrentar la situación que viene: BanBajío

Desde que inició la pandemia de Covid-19 en México, Banco del Bajío (BanBajío), uno de los llamados bancos medianos con sede en Guanajuato, realizó un ejercicio de estrés agresivo para ver cómo se comportaban sus indicadores, y éstos mostraron solidez ante la complicada situación de la economía, pero también permitieron tomar acciones en otras áreas.

En entrevista con El Economista, Edgardo del Rincón, director general del banco, explica que se definieron algunas prioridades como cuidar la calidad de los activos, generar reservas y ampliar la liquidez. No obstante, reconoce que, indudablemente, la cartera vencida crecerá en los próximos meses, no sólo en esta institución, sino en todo el sistema, y para ello BanBajío ya se está preparando.

“Lo que estamos buscando es estar preparados porque seguramente vamos a tener deterioro de las carteras, eso es un hecho, estamos preparando todo un andamiaje para tener la respuesta correcta para nuestros clientes en términos de reestructura, que será necesaria”.

Buenos indicadores

El director de BanBajío precisa que la prioridad del banco ante esta situación era cuidar la calidad de los activos, resalta que hoy la cartera vencida es una de las más bajas del sistema con 1.03%, aunque subraya que es inminente que se incremente en lo que resta del año e incluso en el 2021.

Comenta que desde el segundo trimestre del 2020, se empezaron a generar reservas, que se sumaron 556 millones de pesos para ello, lo que permite que el Índice de Cobertura (Icor) del banco se ubique en 185 por ciento.

“No cabe la menor duda que va haber cartera vencida, es un hecho. La economía va a caer entre 9 y 11 por ciento. Entonces de que va haber cartera vencida, va haber; hay que prepararse para ello (...) en ese sentido lo que hicimos fue empezar a generar reservas (...) y el resto del año (y el próximo) vamos a continuar generando reservas adicionales”.

Destaca que se optó por ampliar la liquidez del banco y el segundo trimestre se terminó con un índice de 142%; mientras que su Índice de Capitalización (Icap) se ubicó en 16.1%, y el de eficiencia en 46 por ciento. “Entonces en todos estos indicadores nos vemos bastante sólidos”.

Vendrán reestructuras

Considera que aunque el programa de diferimiento de pagos de créditos, con un rango de cuatro a seis meses, fue una buena medida, a la cual se inscribió 26% del saldo de la cartera del banco, aún no hay claridad de cuándo terminarán los impactos de la pandemia.

“Entonces la idea es tener la respuesta correcta para que las empresas que puedan recuperarse, que ojalá sea la mayoría, tengan el apoyo y la liquidez correctas para que lo puedan hacer”.

El director de BanBajío subraya que, ahora que terminó el programa de aplazamiento de pagos de créditos, lo que se buscará con las reestructuras es dar más plazo para quien lo necesite, pero también empezar a dar liquidez para el arranque o el incremento de las operaciones.

“Sobre todo estoy pensando en la pequeña y mediana empresa (...) lo que estamos haciendo es revisar los procesos para que la autorización y la ejecución de todas las reestructuras sea realmente en muy poco tiempo y que el cliente pueda tener la certidumbre de que cuenta con el apoyo nuestro”.

Llave del crédito sigue abierta

Edgardo del Rincón destaca que desde BanBajío, y pese a la contingencia, no se ha cerrado la llave del crédito y por el contrario se ven proyectos de forma permanente, aunque reconoce que por la situación económica, ha habido baja inversión y por lo tanto menos proyectos para financiar.

No obstante, argumenta que al haber menos apetito en estos momentos por parte de algunos bancos, BanBajío ve un nicho de oportunidad para ganar más mercado y seguir con su crecimiento.

“En situaciones de este tipo puede haber dudas respecto a los bancos de tamaño medio como el nuestro. Yo creo que las cifras hablan por sí solas. El banco está muy sólido, está muy echado para adelante”.

eduardo.juarez@eleconomista.mx