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Sheinbaum: 100 días, Plan México y los riesgos

En uno de los momentos de mayor complicación de la economía mexicana, las finanzas públicas y la relación comercial del gobierno de México con EU, la primera presidenta de México, Claudia Sheinbaum evaluó optimistamente sus primeros 100 días de gestión y hoy (14 de enero) lanzará su estrategia para aumentar las inversiones internacionales y locales en el país.
Con una perspectiva triunfalista, un perfil de continuidad de lo que denominan la construcción del segundo piso de la cuarta transformación, y un diagnóstico marcado por la euforia, el segundo gobierno del partido hegemónico Morena, buscará enfrentar un contexto local e internacional, singularmente complejo.
El gobierno de Claudia Sheinbaum, presenta hoy el “Plan México”, que es básicamente, la estrategia con la que pretende aumentar la inversión de empresas extranjeras y nacionales en México.
Entre los objetivos específicos está aumentar el contenido nacional en la producción nacional e iniciar la sustitución de importaciones provenientes de China; en una intento por aminorar la inminente aplicación de aranceles del 25% a las exportaciones mexicanas a EU, con la que ha amenazado Donald Trump.
En el zócalo capitalino, la Jefa del Ejecutivo aseguró que se están viviendo “tiempos excepcionales”.
Destacó que su gobierno está cumpliendo, al garantizar todos los programas sociales.
Presumió el alto nivel de creación de empleos (cuando la realidad es absolutamente contraria).
Defendió la Reforma Judicial, que –aseguró– pasará a la historia porque convertirá al Poder Judicial en un órgano autónomo (cuando los expertos, hablan del fin del régimen de los 3 poderes de la Unión) Y confió en que México y EU mantendrán el diálogo, en una relación de respeto y no de subordinación (en medio de las crecientes amenazas de Donald Trump en contra de México).
No hubo autocrítica. No hubo espacio para el más mínimo rasgo de pesimismo.
Hoy el secretario de Economía, Marcelo Ebrard y la coordinadora del Consejo Asesor de Desarrollo Económico Regional y Relocalización (Caderr), la empresaria Altagracia Gómez presentarán los detalles del Plan México.
Darán a conocer las metas a corto y largo plazo a las que se comprometieron con empresarios nacionales y extranjeros en caso de que la administración estadounidense que comenzará el próximo 20 de enero cumpla la amenaza de imponer un alto arancel general a los productos de nuestro país.
Muy probablemente, como en los viejos tiempos, los empresarios anunciarán las cantidades que invertirán este año.
Habrá que ver lo que propone el Plan México, pero sobre todo, con el tiempo, qué tanto se cumple.
Las auto evaluaciones gubernamentales y de los planes que se preparan, son solo una parte de lo que está ocurriendo.
La otra, es la que marcan los datos reales y oficiales. Estos, revelan una marcada desaceleración en el crecimiento de la economía, al cierre del 2024 y para el 2025.
Una marcada debilidad de las finanzas públicas y problemas estructurales, notables en las dos empresas de energía del país: Pemex y CFE.
En el Seminario de Perspectivas Económicas 2025, del Instituto Tecnológico de México (ITAM) del viernes pasado (10 de enero), el ex secretario de Hacienda, Guillermo Ortíz, advirtió sobre el aumento del riesgo país y una posible baja de la calificación crediticia de México.
El exfuncionario fue muy claro al señalar que mientras la presidenta de México busca inversión privada, las reformas de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, las ahuyentan.
Quien fuera también gobernador del Banco de México señaló que México enfrenta una situación fiscal insostenible, con un déficit cercano al 6% del Producto Interno Bruto.
Y alertó que a pesar de la corrección fiscal de casi dos puntos del PIB que el gobierno actual busca realizar, el gasto social sigue aumentando y complica la sostenibilidad de las finanzas públicas.
En el mismo foro, el ex subsecretario de Hacienda, Alejandro Werner pronosticó que México entrará en recesión este año y, debido a la falta de una reforma fiscal, perderá el grado de inversión en el año 2027.
Hasta ahí, la autoevaluación gubernamental, los atisbos sobre el Plan México y las advertencias de los expertos.
Está claro que hay riesgos inminentes por factores internos como la Reforma Judicial, las políticas públicas, poco amigables para la inversión, la desaceleración y eventual recesión económica y las presiones de Donald Trump.
Sólo el tiempo dirá si el optimismo oficial y sus planes se imponen a los datos económicos y las advertencias de exfuncionarios y analistas privados. Parece poco probable que estos últimos se equivoquen. Al tiempo.