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Reflexiones sobre el movimiento “FIRE” (II)
(Parte 2 de 2)
Como hablamos en la primera parte, el FIRE (Financial Independence, Retire Early) busca la independencia financiera y el retiro a edades tempranas. Muchas veces en 10 o 15 años. Para lograr esto, se requiere un estilo de vida minimalista y frugal, que se enfoque en lo importante, porque la idea es vivir únicamente con 30% de los ingresos, ahorrar e invertir hasta el 70% restante.
¿Se puede lograr esto con el ingreso promedio en México? Muy difícilmente. Como sabemos, en nuestro país la mayoría de la gente vive al día y sólo con lo esencial. Sería imposible para muchos ahorrar un porcentaje tan elevado de sus ingresos.
Sin embargo, todos podemos aspirar a la libertad financiera, en un plazo mayor. Varias veces lo he dicho: he visto cómo hasta la gente más humilde es capaz de separar y guardar al menos unos cuantos pesitos para un día lluvioso.
Lo único que se requiere es hacer de ello una prioridad, ahorrar una parte de nuestros ingresos cada vez que nos pagan, con constancia y disciplina (se puede hacer hasta de forma automática), e invertir esos recursos de forma inteligente y acorde con nuestro objetivo de inversión. La manera más simple de hacerlo, sin necesidad de saber invertir, es simplemente hacerlo en la Afore, de manera domiciliada. Aunque desde luego hay otras opciones que requieren mayor conocimiento financiero.
Si hacemos de la libertad financiera una prioridad, necesitamos aprender a tomar control de nuestro dinero, para gastar en la medida de nuestras posibilidades y no endeudarnos. Es importante tener claro que una deuda significa gastar hoy dinero que todavía no hemos ganado. Eso es “robarle” dinero a nuestro futuro: lo contrario a lo que queremos hacer.
Hay algunas variaciones del movimiento FIRE. Por ejemplo: hay personas que tienen muy altos ingresos y por lo tanto no les es necesario reducir su nivel de vida a lo esencial. Pero son la excepción, no la regla.
También hay personas que buscan generar ingresos adicionales. Aprovechan sus habilidades y dedican parte de su tiempo libre en alguna actividad paralela. Otros tienen un negocio propio y todo lo que les genera lo invierten para alcanzar su libertad financiera.
Hay algunas lecciones que podemos tomar del movimiento FIRE, por ejemplo:
Es esencial tener muy claras nuestras prioridades. En este caso es alcanzar la independencia financiera lo más pronto posible.
Debemos tener un plan muy concreto y detallado que nos permita alcanzar ese objetivo. Para la comunidad FIRE es concentrarse en lo esencial, vivir con el 30% de su ingreso, ahorrar el 70% restante e invertirlo en fondos indexados de muy bajo costo (la alternativa en México serían los ETFs). Para ello se necesita constancia y disciplina: dos de los aspectos más importantes de las inversiones. El plan implica además no tener o adquirir deudas de ningún tipo.
Es clave maximizar nuestros ingresos y minimizar nuestros gastos. Muchas personas fallan en esto. De hecho, por lo general, cuando la gente gana más, tiende a gastar más. Busca un mejor nivel de vida, porque ya tienen la capacidad de comprar cosas que antes no podían. Lo que nos lleva de nuevo al primer punto: tener muy claras nuestras prioridades.
Los jóvenes deben aprender a ahorrar e invertir desde una edad temprana, idealmente desde su primer trabajo, una parte de sus ingresos. Esto es fundamental para lograr eventualmente la libertad financiera.
El minimalismo y la frugalidad son estilos de vida que nos ayudan a enfocarnos en lo que en realidad es importante y a eliminar todo lo que no agrega valor a nuestro entorno.
