Gobierno demanda a sheriff Arpaio

Ha sido el clásico enfrentamiento del viejo oeste: el autoproclamado sheriff más duro de Estados Unidos contra los federales.

Durante años, el Departamento de Justicia ha investigado al alguacil Joe Arpaio de Arizona. En diciembre, el Departamento acusó a Arpaio de violar los derechos civiles de los hispanos al detenerlos y arrestarlos de manera ilegal. Luego, durante meses, funcionarios de justicia trataron de negociar un acuerdo. En abril, cuando las negociaciones fracasaron, el Departamento amenazó con demandar.

A pesar de todo Arpaio, conocido por obligar a los presos a vestir ropa interior de color rosa y a trabajos forzados, se mantuvo desafiante: Me niego a renunciar a mi responsabilidad ante el gobierno federal. No pasará en mi turno , manifestó el sheriff en abril.

El Departamento de Justicia anunció ayer que ha demandado a Arpaio, a su oficina y al condado de Maricopa por violaciones de los derechos civiles, incluyendo lo que afirma se trata de la larga y despectiva descripción de los latinos.

En su esencia, se trata de un caso de abuso de poder que implica al sheriff Arpaio y a su oficina, los cuales desatendieron la Constitución, ignoraron las buenas prácticas policiales y no dudaron en tomar represalias contra sus críticos en una variedad de maneras ilegales , manifestó Thomas E. Perez, asistente del Procurador General de la División de Derechos Civiles.

Arpaio, quien ha negado las acusaciones, replicó: Me están diciendo cómo manejar mi organización. Me gustaría resolver esto, pero no voy a renunciar a mi autoridad ente el gobierno federal. Es así de simple .