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“La RSE impulsa fidelidad y productividad”
La transparencia es indispensable, pues garantiza la seguridad de la información en empresas y clientes: A. Fajer.

Estudios de Accenture muestran que un 66% de los consumidores abandona marcas que no cumplen lo que prometen o que que no tienen propósitos sociales detrás de su imagen.
En un entorno donde la confianza del consumidor se convierte en el activo más valioso, las empresas están descubriendo que el verdadero diferencial no reside solo en el producto o servicio, sino en la forma en que se relacionan con su entorno. Para Antonio Fajer, presidente de Pentafon, adoptar prácticas responsables es mucho más que una tendencia: es una transformación estratégica que conecta valores, tecnología e impacto social para construir relaciones comerciales duraderas.
“El modelo de Responsabilidad Social Empresarial ha evolucionado de la filantropía a la integración profunda en el negocio”, afirma Fajer. Hoy, más del 70% de los consumidores —y hasta un 90% entre millennials— prefieren marcas con compromiso social o ambiental. Esta preferencia ya no es simbólica: influye directamente en la productividad interna y en la fidelización del cliente.
En Pentafon, los resultados son medibles. Sus estrategias en inclusión laboral, bienestar emocional y desarrollo del talento han incrementado la productividad en un 25% y reducido la rotación en 40%. Además, su enfoque ambiental —que incluye desde centros de datos energéticamente eficientes hasta la eliminación del papel en trámites internos— ha permitido disminuir el consumo eléctrico anual hasta en un 22 por ciento.
Pero la sostenibilidad no se construye sin transparencia. Fajer es claro: “La ciberseguridad y la ética digital son pilares para ganarse la confianza del cliente”. Pentafon opera bajo estándares internacionales como PCI DSS v4 e ISO 27001, y ha desarrollado una estrategia de gobernanza de IA centrada en trazabilidad humana, inclusión y protección de datos. Para los consumidores actuales, ese nivel de compromiso no es opcional: es una condición.
La fidelización, hoy depende tanto del propósito como de la experiencia. Iniciativas como el programa “Dejando Huella” —que impulsa acciones de reforestación, reciclaje y voluntariado— no sólo generan impacto ambiental positivo, sino que refuerzan el sentido de pertenencia entre los colaboradores. El 83% de ellos recomienda Pentafon como un gran lugar para trabajar, destaca el vocero.
El desafío, para Fajer, es mantener coherencia entre discurso y acción. “Los consumidores detectan la incoherencia al instante”, señala. Según Edelman, el 69% de las personas deja de comprar a marcas que no cumplen lo que prometen.
Para las empresas jóvenes o en crecimiento, el consejo de Fajer es claro: integrar la responsabilidad social al centro del modelo de negocio, medir constantemente el impacto y alinear los valores con acciones verificables. “La sustentabilidad bien implementada no solo mejora la reputación, sino que optimiza procesos, atrae talento y construye confianza, el recurso más escaso en los mercados actuales.”
En tiempos donde la economía verde y la ética operativa marcan el pulso empresarial, Pentafon demuestra que la sostenibilidad también puede ser una ventaja competitiva.
