Amor sin etiquetas. El nuevo álbum de familia, una mirada a la diversidad

La Galería José María Velasco (GJMV) exhibirá "Amor sin etiquetas. El nuevo álbum de familia", de la fotógrafa mexicana Lizeth Arauz. El proyecto visual comenzó en 2018 y transcurrió en plena pandemia, pero continúa desarrollándose hasta la fecha. La exhibición tiene la finalidad de presentar en un proyecto visual, ejemplos de las nuevas configuraciones de familias en México, en tiempos posmodernos.

A propósito de su próxima inauguración El Economista recorrió la muestra y conversó en exclusiva con la autora y el curador Irving Domínguez. La fotógrafa documental y comunicadora gráfica asegura sentirse muy emocionada por exhibir de manera presencial su material “me parece el espacio idóneo para este proyecto por su trayectoria de empatía con los temas de diversidad, inclusión y respeto”.

Platica que ha sido un largo trayecto para cumplir este objetivo, “cuando concluí Sistema Nacional de Creadores era un momento en que las galerías seguían cerradas por ello una primera muestra de este trabajo se realizó en línea a través de una galería virtual con una primera propuesta de selección de imágenes”.

Para una segunda etapa entró Irving como curador, él se caracteriza por ser arriesgado y con una visión distinta de las cosas. “Para mí era importante que le echara una mirada al trabajo, para que pudiera ver cosas que de pronto yo no veo, porque uno como creador se enamora de las imágenes, son tus hijos y a todos los ves bonitos”.

Con eso en mente para esta ocasión se logró una narrativa muy completa, con la proyección de Lizeth y la curaduría de Irving. “Este proyecto logra la empatía de la gente porque todos somos familias distintas, cada vez nos vamos conformando de manera distinta”, comparte el curador.

“Este es un proyecto importante que hace una contribución clave para visibilizar la enorme diversidad de vínculos familiares que hay en México”. Asegura que es relevante que existan espacios de arte e institucionales de este tipo con nuevas narrativas y que se pueda reconocer en un lugar público la diversidad.

Además, asegura que encaja perfecto en el mes dedicado a la diversidad, “la reflexión es consistente sobre las uniones familiares ya sea con personas trans, del mismo sexo, o heterosexuales que están reconstituidas, en todos lados todavía se presentan sesgos de aceptación y esas sutilezas son las que terminan en algunos casos haciendo que los vínculos familiares se modifiquen, es relevante poner esto sobre la mesa y hacerlo visible”.

Los orígenes del proyecto 

Lizeth comparte que el proyecto surge por su condición de madre soltera. “Con esta posibilidad de siempre intentar caber en la sociedad, pareciera que al mundo le urge que tengas un marido o una familia convencional que nadie ocupa afortunadamente”. Así es como la imagen de Lizeth y su hija encabezan esta muestra.

Ella asegura que siempre quiso hablar sobre esa plenitud con su familia, con el primer vínculo que es su hija y de decirle al mundo “somos una familia completa”, pues ellas no tienen carencias, sino plenitud. Un segundo momento de motivación e inspiración muy bello para lograr este trabajo fue cuando a una de sus amigas le otorgaron la primera adopción como madre soltera en Ciudad de México, ella demostró que económica y psicológicamente estaba lista para acompañar a un bebé. 

Así poco a poco, haciendo un trabajo de investigación, se logró “una diversidad maravillosa” para esta muestra, desde el primer matrimonio transexual, que es Diana y Mario; también está Joseline Sosa, una mujer trans que vive amorosamente con sus sobrinas en Oaxaca; Elia, que cohabita con su manada; Manu, un chico trans que vive en Hidalgo con su madre y su abuelo; también se habla de las familias poliamorosas y su apuesta por el conocimiento y el respeto.

Pero también está la otra cara de la moneda, familias que decidieron de pronto no estar “y es totalmente entendible, no todos estamos listos”, incluso hubo familias que previo a la sesión fotográfica cancelaron. Para Lizeth la reflexión es que las personas que aceptaron son porque están muy listas y preparadas para luchar por sus derechos, pero “incluso algunos de los que no aceptaron en su momento hoy me los encuentro y son otros, están visibilizando quienes son y eso lo celebro y lo respeto”.

Abrir el arte en espacios públicos

De acuerdo Con Alfredo Matus, director de la galería, este espacio tiene una década con la trayectoria de trabajar sobre las identidades, “era una necesidad dentro de los espacios públicos, siempre era tabú y sigue siendo tabú, a estos temas se les otorgan todavía salas muy pequeñas, en pisos elevados, ahí escondidos para que la gente no vea estas cosas”.

Comparte que aún hay un resquemor para hablar de estas cosas, pero lo importante de Lizeth es que ha enfatizado la idea de identidades, definirnos, “pero con una aproximación a la cotidianeidad y con vínculos emocionales sobre cualquier prejuicio. Esta idea de rastrear en sus casas y hacer públicas sus relaciones, no como objeto de estudio, sino en su vida cotidiana lo hace totalmente relevante”.

Concluye que los museos tienen una función social, que son un vaso comunicante entre muchas formas de pensar y que aquí se aterrizan para dialogar, “esa es la idea de ser un centro cultural en el que convergen diferentes tipos de personas y se dirimen las legitimidades alrededor de nuestros eventos y exposiciones, es el camino que queremos seguir”.

Sobre la exposición

Durante el mes de junio y julio alrededor de la exposición habrá performance, charlas y presentaciones de libros. Además, en el área de Pieza del mes se exhiben algunas acuarelas de la leyenda viva, Terry Holiday, actriz, vedette y activista pionera transexual de la causa LGBTIQ+, desde los años setenta.

La exposición se inaugurará el sábado 17 de junio, a las 12 horas, y permanecerá hasta el domingo 13 de agosto, en la Galería José María Velasco, ubicada en Peralvillo 55, colonia Morelos. El horario de visita es de 10 a 18 horas de martes a domingo, miércoles hasta las 19 horas. La entrada es gratuita. 

nelly.toche@eleconomista.mx

kg