Se intensifican protestas entre policía y residentes en Ferguson

Mientras caía la noche del martes, la policía y los manifestantes se preparaban para repetir los enfrentamientos nocturnos 11 días después de que un oficial mató a un adolescente negro desarmado.

Cerca de la medianoche, en las calles donde Michael Brown fue asesinado el 9 de agosto se respiraba tensión. Botellas llenas de hielo y agua fueron lanzadas contra la policía. Algunas estaban llenas de orina. La policía dijo que los agitadores se escondieron detrás de los periodistas. Los oficiales irrumpieron en una zona de prensa para capturar a los perpetradores. En total, 47 personas fueron arrestadas, es la tercera redada desde que comenzaron las protestas.

Pero el capitán Ronald Johnson, de la Policía de Carreteras de Missouri, dijo que la ciudad, desgarrada por los disturbios, comenzaba a sanar.

Creo que las protestas bajaron de intensidad , dijo Johnson durante una conferencia de prensa a las 2:30 de la mañana, hora del centro.

Ellos caminaban, hablaban con la gente , dijo Johnson. Instaron al orden, la calma y la paz. Eso tuvo una influencia pacífica sobre las personas más jóvenes .

Esa calma precedió al caos. La noche comenzó con una procesión que exclamaba Manos arriba, no disparen . Un grupo de alumnas de escuela primaria entregó flores. La policía se dispersó entre los asistentes.

Sólo algunos oficiales parecían aplicar la regla de que los manifestantes podían caminar, pero no estar quietos o congregarse.

Vi a la policía detener a una señora porque dejó de caminar , dijo Bryan Maynard, de 35 años, que asistió a las protestas el martes.

Más tarde, alrededor de las 9:30 de la noche, cientos de personas se desviaron de la calle, donde se escuchaban consignas como: ¡Estamos listos! y No hay justicia, ni paz, ni policía racista y Todos somos Mike Brown .

Alrededor de las 10 de la noche, cámaras de televisión mostraron a los oficiales llevando a cabo los arrestos. El lunes por la noche, al menos 59 personas fueron detenidas en Ferguson, según cifras de la cárcel del condado de St. Louis. Todos menos tres fueron acusados de negarse a dispersarse , un delito menor. De los otros, uno fue acusado de interferir con un oficial . Y dos fueron acusados de uso ilegal de un arma , una acusación general que podría significar el disparo de un arma o simplemente exhibirla de una manera amenazante .

La mayor parte de los arrestados -41 de 59- eran de Missouri. Los otros vinieron de lugares tan lejanos como Chicago y San Diego.

Y la tensión en las calles puede ser un presagio de lo que vendrá en el tribunal.