Agradece EU a México apoyo tras inundaciones

El gobierno de Estados Unidos, que encabeza el presidente Donald Trump, agradeció a las autoridades de México por haber enviado bomberos y personal de protección civil a Texas para ayudar en labores de rescate tras las inundaciones repentinas sufridas el fin de semana, que hasta ayer 8 de julio, habían causado la muerte de 111 personas.

“Agradecemos a nuestros socios regionales, incluyendo a nuestros amigos y vecinos en México, quienes generosamente enviaron a valientes bomberos y miembros de sus equipos de rescate acuático de protección civil para apoyar las labores de búsqueda y rescate en Kerrville, Texas”, afirmó Tammy Bruce.

Ante la prensa, desde Washington, D.C., la vocera del Departamento de Estado de EU reconoció el apoyo internacional, en específico del gobierno de México, en las labores de rescate por la emergencia declarada en la región fronteriza.

Los equipos de rescatistas mexicanos de Coahuila y Nuevo León están en la zona de desastre en Kerrville, Texas, desde el pasado domingo y lunes, respectivamente.

La Dirección de Protección Civil y de Bomberos de Ciudad Acuña, Coahuila, informó del envió de nueve elementos de rescate acuático y cuatro voluntarios de la Fundación 911.

El gobernador de Nuevo León, Samuel García, envió también a territorio texano a elementos de protección civil y apoyos caninos para ayudar en las labores de rescate.

Vía la red social X, Ronald Johnson, embajador de Estados Unidos en México, se refirió a la ayuda mexicana.

“Estados Unidos y México están unidos, no sólo como vecinos, sino como familia, especialmente en tiempos de necesidad. Los equipos caninos mexicanos, entrenados con apoyo de los Estados Unidos para misiones de seguridad, están ahora en Texas ayudando a las familias a encontrar a sus seres queridos desaparecidos. Reiteramos nuestro compromiso de trabajar juntos con México en momentos como este”.

La región conocida como Hill Country, en las afueras de San Antonio, Texas, fue la más devastada por las inundaciones repentinas.

Zona de emergencia

La mayor parte de las víctimas mortales y la búsqueda de más víctimas se concentraron en el condado de Kerr y en su capital, Kerrville, una ciudad de 25,000 habitantes convertida en zona de catástrofe cuando las lluvias torrenciales azotaron a primera hora del viernes pasado, desatando inundaciones mortales del río Guadalupe.

Solo en el condado de Kerr se habían recuperado hasta el martes los cadáveres de 94 víctimas de las inundaciones, más de un tercio de ellas niños, dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott, en una rueda de prensa celebrada a última hora de la tarde tras recorrer la zona por vía aérea.

Abbott dijo que se sabía de otras 161 personas desaparecidas en la zona de las inundaciones.