El fuerte discurso de Julián Castro

Cuando todos esperaban el discurso de Clinton, pensé comentar sobre los principales oradores de la noche del martes, el gobernador de Massachusetts, Deval Patrick, y el alcalde de San Antonio, Julián Castro. Es difícil calcular la magnitud del impacto, si lo hay, que estos discursos lograrán, pero los dos estuvieron, a su manera, tan brillantes como el de la señora Obama.

El gobernador Patrick reforzó uno de los pilares de uno de los varios temas en la campaña de Obama en contra de Romney al mostrarlo como un débil Gobernador de Massachusetts. Este argumento no ha progresado mucho, pero Patrick presentó un caso convincente con el uso de las estadísticas. Pero lo más importante es que argumentó -algo que posteriormente tomaría Castro en su discurso al concluir éste- que la candidatura de Romney y Ryan no entiende el principio central del sueño americano: que el gobierno tiene un papel en ayudar a crear las oportunidades.

Castro fue muy puntual en este tema al presentar posiblemente la línea más punzante de ambas convenciones hasta el momento. Relató cuando Mitt Romney le dijo a un grupo de estudiantes universitarios que deberían considerar iniciar una empresa. Pero ¿dónde podrían encontrar el capital inicial estos jóvenes y potenciales empresarios? Según el relato de Castro, Romney sugirió a su auditorio en ese momento: de ser necesario, pedirle prestado dinero a sus padres . Castro hizo una pausa y expuso: Oye, ¿por qué no pensé en eso? . El alcalde continuó y afirmó que Romney es un buen tipo, sólo que no tiene ni idea de lo buena que ha sido la vida con él .

Más allá de estas grandes líneas, Castro se proyectó poderosamente sobre el tema central que divide a los dos candidatos presidenciales de este año: el papel adecuado del gobierno. ¿Qué tiene de especial?, preguntó, no es su historia familiar de grandes logros ante un escenario adverso, lo que tiene de especial es que Estados Unidos lo ha hecho posible. (Castro pudo haber reforzado su punto al hacer referencia a las familias de Michelle Obama, Paul Ryan y otros millones de estadounidenses que recibieron algún tipo de apoyo en sus vidas).

El alcalde continuó y expuso que Estados Unidos logra esto al crear activamente oportunidades para las personas. Como Castro lo expresó, las oportunidades hoy en día (la inversión en educación, infraestructura, etcétera) siempre han sido esenciales para la prosperidad el día de mañana.

Si rompemos ese vínculo, como Romney y Ryan lo harían, nos convertimos en un país muy diferente y más pobre. Sin duda, los demócratas han tenido un buen comienzo.