Se contrajo 16.5% gasto de visitantes a Cancún

Cancún, QR. De manera consistente con los estudios que hablan de un declive en el gasto promedio de los turistas que visitan Cancún, la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (Canirac) reporta una baja en la facturación promedio de los comensales que están acudiendo a los más de 3,500 restaurantes y fondas de la zona urbana de Cancún.

Mauro Amati Vecci, dirigente de la Canirac en Cancún, dijo en conferencia de prensa que el periodo vacacional de verano no está resultando tan alto como se esperaba, pues el consumo promedio del comensal está bajando, sobre todo el de los turistas extranjeros y en especial del estadounidense, que es más de 45% del volumen total que recibe Cancún anualmente.

Aseguró que los aumentos en los suministros de luz y gasolina influirán en la operación diaria del restaurante promedio de Cancún, pero buscarán absorber al máximo los incrementos en el precio de los insumos. Sin embargo, a final de año es muy probable que el incremento en el costo de los insumos se vea reflejado en los precios finales de los productos.

Hasta el momento los restauranteros han absorbido el sobreprecio derivado de la apreciación del dólar y su repercusión en el costo de los insumos importados de la industria restaurantera, comentó.

No obstante, advirtió que la conjunción de diversos elementos, como las alzas en las tarifas de suministro eléctrico y en el costo de los combustibles, también tendrá una repercusión en el costo de los platillos que se ofertan en la mayoría de los establecimientos de Cancún y el resto de la República.

Aseguró que la baja en el consumo del turista promedio se focaliza principalmente en el consumo promedio del viajero extranjero y, particularmente, en el turismo estadounidense.

Números duros

El Estudio Turista, presentado por la firma Marketing Consultants (MKT) hace unas semanas, reveló que mientras en el primer trimestre del 2015 un grupo promedio de 2.7 integrantes derramaba al visitar Cancún, durante cinco días, 2,969 dólares aproximadamente, en el mismo periodo del 2016 ese gasto cayó hasta los 2,478 dólares, lo cual representa una contracción de 16.5 por ciento.

El gasto en servicios complementarios al hotel también se ha desplomado en 21.4%, al pasar de 448 dólares en los primeros tres meses del 2015 hasta los 352 billetes verdes en el 2016.

El estudio, financiado con recursos de la Oficina de Visitantes y Convenciones (OVC) de Cancún, reveló que la tendencia no es nueva, pues desde hace cinco años se registra un cambio en el perfil del viajero que visita Cancún; no obstante, el desplome en el gasto promedio del visitante estadounidense se ha pronunciado, sobre todo en los primeros cinco meses del 2016, con una caída de 23.1%, lo cual no se registraba desde la crisis del 2008-2009, cuando el gasto se situó en los 350 dólares.

Esta coyuntura de la paridad monetaria también coincide con una desaceleración de la economía estadounidense que está derivando en un alza de la desconfianza y restricción en el consumo de sus ciudadanos, es decir, una contracción en el gasto que se está viendo claramente reflejada en las estadísticas de gasto en Cancún.

Actualmente, 29.6% de los estadounidenses que visitan Cancún tiene ingresos promedio menores a los 25,000 dólares anuales; 28.6% percibe hasta 49,900, mientras que 26.8% gana hasta 75,000 dólares al año. Sólo 8.6% ingresa 150,000 dólares o más, según las más de 1,200 encuestas a turistas estadounidenses aplicadas en el Aeropuerto Internacional de Cancún para el estudio.

En el caso de Los Cabos, hasta 30% de los turistas captados son considerados de alto poder adquisitivo, con ingresos arriba de los 150,000 dólares al año, aunque Cancún recibe un volumen siete veces más de turistas que lo que reciben en Los Cabos, acotó.

En términos del valor de la actividad económica tasada en dólares, durante los primeros cinco meses del año ésta ha disminuido su valor en 157 millones de dólares menos respecto del mismo periodo del año pasado, con una baja más pronunciada en las tarifas aéreas, las cuales entre enero y mayo del 2015 se cotizaban en 694 dólares contra los 581 que se cotizaron durante los primeros cinco meses de este año.

Jaime Herranz Monedero, responsable del área de estadística de MKT, reveló hace unas semanas que los números son contundentes y confirman lo que desde hace años han referido consultorías internacionales como la neoyorquina Alvarez & Marsal, la cual califica a Cancún como un destino commodity, sin una diferenciación cualitativa respecto de cualquier otro destino predominantemente all inclusive, al que se le elige por asequibilidad de precio, más que por sus bellezas naturales.

El valor del dólar, hipótesis

El analista explicó que una de las hipótesis que podrían explicar la caída en el gasto promedio del visitante es precisamente la fortaleza del dólar, que hoy permite al turista estadounidense adquirir más con la misma cantidad de dólares que gastaba apenas un año atrás.

La fortaleza de esta moneda sólo explicaría en parte por qué apenas 33.9% de los turistas que han visitado Cancún a mayo de este año ha asistido a un restaurante fuera de su hotel; por qué sólo 21.1% de esos visitantes acude a centros nocturnos, o a qué se debe que sólo 41.9% sale a comprar a plazas comerciales de la zona hotelera de Cancún; sin embargo, hay otros elementos que inciden pero que no son objeto del estudio.

Herranz Monedero añadió que la culpa de esta situación ya no puede atribuirse en 100% al todo incluido, pues actualmente 65% del turismo que visita Cancún adquiere su habitación en ese esquema, el cual ha dejado de crecer e incluso se mantiene en los mismos niveles desde hace ya algún tiempo.

Una de las hipótesis que explican el estancamiento del gasto del turista en servicios complementarios a los hoteles es la falta de diversidad y calidad en la oferta para el turista, es decir, todas las plazas comerciales ofrecen lo mismo al viajero, no hay diversidad de producto y ello no alienta al turista a dejar la comodidad de su hotel. Los problemas del destino apuntan más a un descenso en la cantidad y calidad de la oferta de servicios fuera del hotel. Esto es lo que parece ser el mayor impedimento para atraer turistas con mayor nivel de ingreso con capacidad de gasto , abundó el analista.

jvazquez@eleconomista.com.mx