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Oaxaca ahora inundada por basura
El paro que sostienen trabajadores del Sindicato 3 de Marzo, tiene paralizados los servicios de limpia, por lo que en calles y esquinas se ven importantes cantidades de desechos, que comienzan a descomponerse.
Oaxaca.- Por tercer día consecutivo, trabajadores de limpia adheridos al Sindicato 3 de Marzo mantienen paralizadas sus actividades, a fin de presionar a la autoridad municipal para que cumpla con los compromisos contraídos con este gremio.
En medio de toneladas de basura que se han acumulado en las esquinas de toda la ciudad, el Sindicato 3 de Marzo mantiene su protesta, misma que hoy alcanzó diversas oficinas del gobierno capitalino, donde los trabajadores de limpia bloquean la salida y acceso a los trabajadores.
Barrenderos y recolectores de basura mantienen tomado desde esta mañana el Palacio Municipal, el modulo de Recaudación de Rentas y las oficinas de Obras Públicas, los tres ubicados en el Centro Histórico de esta ciudad; asimismo, las oficinas de Desarrollo Urbano que se encuentran al norte.
De igual forma, mantienen en su poder el encierro de los carros recolectores de basura en la avenida Gómez Morín, sobre las riveras del río Atoyac, al sur de la capital, y el basurero municipal, localizado en el municipio de Zaachila, a unos 15 kilómetros de Oaxaca de Juárez.
Al respecto, Carlos Chimil Pasos, líder de los trabajadores, reprochó a la autoridad municipal el incumplimiento a los acuerdos suscritos a principio de año con este gremio, quienes solicitaron refacciones para los vehículos de limpieza, material para confeccionar sus escobas, uniformes y otros instrumentos para realizar su labor.
De igual manera, dijo, el gobierno municipal se comprometió a intervenir para la cancelación de los permisos otorgados a particulares, quienes brindan también el servicio de recolección de basura en toda la ciudad, pero que propician la anarquía en el basurero municipal.
Lo anterior, añadió, también va en contra del contrato colectivo de trabajo suscrito con este sindicato.
Cabe señalar que en el primer cuadro de la ciudad, donde se concentran un número importante de hoteles y restaurantes, se observan importantes cantidades de basura orgánica que comienza a descomponerse, acelerada por la ocurrencia de lluvias constantes en los Valles Centrales.
A pesar del llamado de la autoridad municipal a la ciudadanía para que no saquen a la calle sus bolsas de basura, ésta ha hecho caso omiso y las montañas de basura comienzan a acumularse en las esquinas.
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