Empresas queretanas incumplen normas de seguridad

La delegación estatal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) ha recaudado 22 millones de pesos por concepto de multas a 154 empresas en Querétaro durante el primer semestre del año, informó el delegado federal de la dependencia, Francisco Landeras Layseca.

Precisó que las multas responden a irregularidades que se han detectado en las industrias, principalmente en materia de adopción de medidas de seguridad y salud de los trabajadores, dado que se han registrado accidentes que no se han reportado a las autoridades correspondientes, por lo que se ha enfatizado en la necesidad de que se siga capacitando en estos temas y, sobre todo, que se respeten las normas.

Cuando llega la inspección ordinaria o extraordinaria, los obreros no traen las medidas de seguridad, ellos dicen que no les han dicho cómo ponerse o no les han dado el equipo , comentó.

El problema, dijo, radica en los centros de trabajo, donde se origina la mayor parte de accidentes por la mala información hacia los trabajadores, toda vez que son conocimientos que no terminan de llegar a ellos.

Inspecciones

Francisco Landeras aseveró que la dependencia continuará trabajando en la inspección en las más de 8,000 empresas registradas. Hasta junio se revisaron 853.

Indicó que es en materia de seguridad donde la industria en Querétaro continúa fallando, siendo principalmente las empresas de recién apertura las que incurren.

Dijo que en el 2011 la multa a empresas por este concepto fue de 37 millones de pesos, mientras que sólo en el primer semestre del 2012 ya se llevan 22 millones de pesos.

El funcionario destacó que es necesario seguir trabajando y concientizando a las empresas para que cumplan con sus obligaciones; no obstante, hay participación en la capacitación en cuanto a prevención de incidentes.

Las 8,000 empresas que tenemos registradas están creyendo mucho en la capacitación. Hay una nueva actitud en la que el empresario quiere saber más sobre las normas, sobre todo en seguridad , concluyó.

sirse.rosas@eleconomista.mx