Pistorius, el superhombre rumbo al olvido

Su historia de triunfo y superación pese a las adversidades que implicaba ser un atleta paralímpico, lo llevaron a ser asediado por las marcas y a ser tomado como un héroe en todo el mundo por haber logrado participar en unos Juegos Olímpicos (JO) con atletas convencionales.

Por eso, hasta antes del pasado 14 de febrero, el atleta sudafricano, especialista en las carreras de 400 metros, tenía ingresos, sólo por patrocinios, de 2 millones de dólares al año provenientes de empresas como Nike, Oakley, la firma británica de telecomunicaciones BT, el diseñador francés Thierry Mugler, entre otras.

Sin embargo, tras haber caído en el escándalo, acusado de asesinar a su novia Reeva Steenkamp, el otrora campeón paralímpico comienza a ver caerse el mundo que él mismo construyó a lo largo de su inspiradora carrera.

Apenas la semana pasada, Nike y Oakley, dos de sus principales sponsors, finalizaron los contratos que tenían con Pistorius: Creemos que Oscar debe afrontar el proceso y vamos a seguir de cerca la situación , dijo la marca deportiva en un comunicado.

John Taylor, director de una compañía de patrocinio deportivo y un veterano de la industria, en una entrevista con la BBC, dijo: Incluso si Pistorius es declarado inocente, se ha convertido en una mercancía defectuosa.

Este caso es muy diferente al de Tiger Woods y Lance Armstrong. Esto es algo de vida y muerte. No hay vuelta atrás , aseguró Taylor.

De acuerdo con un reporte de la consultoría IEG, la industria global de los patrocinios está valuada en 50,000 millones de dólares al año y más de 80% de esa cifra se gasta en deportes.

Nike, que tiene ingresos anuales de más de US$24,000 millones, gasta millones de dólares en patrocinios deportivos al año. Por ejemplo, se estima que su reciente acuerdo con el golfista norirlandés Rory McIlroy le costará a la compañía entre 100 millones de dólares y 125 millones de dólares en el transcurso de los próximos cinco años.

PISTORIUS EN NÚMEROS ROJOS

Aunque el sudafricano logró la libertad bajo fianza en lo que se resuelve el juicio en su contra, parece estar teniendo un momento financieramente difícil. Según los datos que proporcionó a la Corte, el atleta paralímpico tiene en sus cuentas una suma de 112,000 dólares, cifra apenas poco mayor de lo que tuvo que pagar de fianza para salir libre, pues le requirieron 110,000 dólares.

Del mismo modo, tras haber cancelado todas sus carreras en este 2013, el atleta estaría perdiendo alrededor de 1.5 millones de dólares anuales, que es el estimado de ingresos que tiene en un año de competencias.

Así pues, quien fuera admirado por todos en algún momento por la valentía y el coraje de seguir adelante pese a no contar con sus dos piernas y aun así conseguir títulos paralímpicos, parece estar condenado a caer en el olvido de las glorias deportivas.