El respaldo del gobierno federal mejoró la calificación crediticia de Pemex y elevó la confianza de los mercados. Sin embargo, persisten dudas sobre su capacidad para generar flujos que le permitan cumplir con su pesada deuda.
El respaldo del gobierno federal mejoró la calificación crediticia de Pemex y elevó la confianza de los mercados. Sin embargo, persisten dudas sobre su capacidad para generar flujos que le permitan cumplir con su pesada deuda.